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ASUNCIÓN.- Por lo visto, el presidente del Senado, Mario Abdo Benítez, solo concede entrevistas a los medios que aplauden sus actos y se muestran complacientes con él, y no quiere saber nada de entrar en contacto con los que tienen una actitud crítica hacia sus actos y dichos.
Ayer, intentamos hacerle una entrevista sobre la situación de su sucesor, Robert Acevedo, y respondió con una burla: “jaja… con objetividad”. Cuando le respondimos preguntándole si él solo habla con los medios amigos, tardó bastante en responder y cuando lo hizo se fue por las ramas: “Saludos al periodista objetivo de Livieres”, mencionando al director del diario ADN, Benjamín Livieres.
Así es cuando se nota que Marito no es más que un paracaidista de la política. Los experimentados, los que tienen cintura para enfrentar loas y rechiflas no tienen ningún problema en dar entrevistas a los que están a favor y en contra suya, porque saben que en política no hay que ceder espacios y hay que aprovechar siempre la atención de los medios, con más razón de aquellos que los atacan.
Marito no es más que un nene malcriado que quiere estar cerca solamente de quienes le tratan bien. A lo mejor lo que ocurre es que tiene miedo de no poder responder con solvencia a los medios que no se dejan seducir por su encanto, así que los evita.
