WASHINGTON.- Según investigadores, tras una evaluación sistemática de las medicinas aprobadas por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) entre 2009 y 2013, se constató que la “mayoría de los medicamentos entraron en el mercado sin evidencia de beneficios para la supervivencia y calidad de vida”.
“Cuando se lograron ganancias de supervivencia por sobre las opciones de tratamiento existentes o el placebo, a menudo fueron marginales”, concluye el trabajo.
“Ningún estudio reciente ha examinado sistemáticamente la base de pruebas y la magnitud del beneficio de los medicamentos contra el cáncer aprobados por la EMA”, se afirma en la investigación.
El estudio concluye, además, que hay “poca información nueva” para guiar a los médicos y a sus pacientes sobre si deben o no pagar los costosos tratamientos para el cáncer.
Cuando en los sistemas sanitarios financiados con fondos públicos se aprueban y pagan medicamentos caros que “carecen de beneficios clínicamente significativos”, podría no sólo perjudicarse a los pacientes, sino “desperdiciarse importantes recursos sociales y socavar la prestación de una atención sanitaria equitativa y asequible”, recoge el informe.