Pasó la semana sin que la Comisión de Hacienda del Senado haya estudiado y dictaminado el proyecto que aprueba un contrato de préstamo del BID por 200 millones de dólares, lo que indica que la ley no quedará sancionada antes del receso legislativo y 50 mil trabajadores quedarán sin sueldo y aguinaldo, además de que las 130 obras viales seguirán paralizadas.
ASUNCIÓN.- Si para la semana próxima la comisión no dictamina este proyecto y no se trata en la sesión del jueves 1 de diciembre, lo más probable es que ya no sea tratado antes del 20 del mes, cuando los senadores se tomarán sus inmerecidas vacaciones de más de 2 meses, aunque seguirán cobrando sus millonarias dietas durante todo el tiempo de “descanso”.
La excusa de los miembros de la comisión presidida por Desirée Masi es que aún no han tenido tiempo de analizar el nuevo proyecto, remitido por el Ejecutivo cumpliendo con todas las exigencias del Senado, que rechazó el primer documento. Dicen que necesitan convocar al ministro de Obras Públicas, Ramón Jiménez Gaona, y hacer cruzamiento de datos para comprobar la veracidad de la información arrimada por el Ejecutivo.
Aunque esto sea cierto y el primer rechazo no haya sido solamente una cuestión política como lo dejó entrever el liberal Carlos Amarilla, el nuevo proyecto lleva en poder de la comisión unas 3 semanas y si hubiera habido verdadero interés en paliar la difícil situación de los 50 mil obreros y otros más de 150 mil que se verán afectados de manera indirecta, ya hubieran podido realizar todas estas gestiones. Sin embargo, no han movido un solo dedo. Nadie fue convocado y cuando se pregunta a alguien de la comisión qué se está haciendo para impulsar el tratamiento de este tema, solo responde con balbuceos, como Silvio Ovelar, quien lo único que pudo decir fue que “nosotras también queremos ser serios”.
Ser serios sería dar una solución a esta grave crisis social que está en puerta y que será exclusivamente culpa de los senadores que, otra vez, priorizaron las cuestiones políticas y no las que darían solución a importantes sectores ciudadanos. Es increíble que estos señores no tengan la más mínima conciencia solidaria, a pesar de tener en sus manos la posibilidad de evitar este desastre.