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SANTIAGO DE CHILE – El terrible caso de una menor embarazada a consecuencias de una violación reabre el debate sobre la legalización del aborto en el país andino.

Una niña de 11 años quedó gestante a consecuencias de los abusos sexuales que sufría de su padrastro de 41 años, el hecho fue denunciado por los profesores de la víctima, quien se encuentra en un centro médico siendo tratada. Su agresor fue preso y espera ser condenado.

Sin embargo, la situación dejo conmocionado a todo Chile y dividió a la sociedad entre los que apoyan y no un aborto para la infante afectada, quien deberá traer al mundo un bebe no planeado y fruto de una violación.

En su segundo mandato, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, prometió impulsar una ley que permita el aborto en caso de peligro de vida para la madre, malformación fetal y violación, pero el mismo se encuentra estancado en el medio de un análisis del congreso que solo hace más lento su posible aprobación.

“Se debe aprobar a la mayor brevedad posible el proyecto de ley de aborto en tres casos y se han de revisar los contenidos de lo que se está debatiendo, porque determinados aspectos no contribuyen necesariamente a proteger a las víctimas”, expresa un comunicado emitido por varias organizaciones de los derechos humanos.

Por su parte, los líderes de varias religiones condenan la intención e invitan a revisar otros mecanismos para solucionar la problemática.

El 66% de las embarazadas por violación es menor de edad y el 11% tiene menos de 12 años. Además, en un 90% de los casos, la violación es cometida por familiares o conocidos, informan entes civiles por los derechos de la mujer y de la niñez.