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COLUMBUS, OHIO.- La historia del niño que volvió del cielo conmovió a toda la sociedad americana. Ahora, con 20 años, Alex Malarkey, el icónico pequeño (ya no tan pequeño) llega a la Corte. Dice que la historia, en realidad, fue una mentira que fabricó su papá, Kevin Malarkey, que luego se benefició económicamente con la venta de un libro, según el medio argentino Clarín.
Esta semana, Alex denunció a su papá y a la editorial Tyndale House, dedicada a temas religiosos. Ese libro llamado “El niño que regresó del cielo” fue un éxito absoluto y vendió, en 2010, más de un millón de ejemplares con su historia “conmovedora”.
Luego de un accidente automovilístico, Alex, quien entonces tenía seis años, quedó al borde de la muerte, no había chances de que pudiera sobrevivir. Permaneció más de dos meses en coma, con su cráneo destruido. Cuando milagrosamente despertó, advirtió que estaba cuadripléjico.
Ese milagro, el de sobrevivir pese a todo, fue narrado por su familia con un gran y verosímil relato. Así, cuando pudo recuperar la voz, Alex comenzó a decirles a familiares y amigos que había estado en el Cielo, que había visto a Jesús (aunque también al Diablo) y que había viajado al Paraíso del que tanto le habían hablado en su casa.
La realidad, según parece, es que cuando el chico despertó, su papá comenzó a convencerlo de que había tenido una experiencia mística, de que había estado con Jesús. Tiempo después, “vendió” esa idea a una editorial, que lucró con una historia inventada.
“Quiero que todo el mundo sepa que la Biblia es suficiente. Aquellos que venden esos materiales deben ser llamados al arrepentimiento y a considerar a la Biblia como suficiente,” dijo el adolescente cuadripléjico en su carta abierta.
“No fui al cielo. Dije que había ido al cielo porque pensé que me haría llamar la atención. Cuando dije tales cosas, nunca había leído la Biblia. La gente ha obtenido ganancias de mentiras, y continúan haciéndolo.”, dijo.
