ADN Digital
Artículos relacionados
Estos zurditos, como diría el militar retirado argentino, Aldo Rico, no quieren ver ni escuchar nada. Para ellos todo está mal y para lo único que sirven, en este caso los parlamentarios, es para vivir a costilla del pueblo y pasarse todo el tiempo pergeñando sus desatinos y buscando maneras de desacreditar y hasta desestabilizar al gobierno.
“No hay peor ciego que quien no quiere ver, ni peor sordo que quien no quiere oír”, dice un refrán anónimo y sin ninguna duda en eso están los zurditos. La generación más joven no debe saber lo que fueron las campañas de terror en los tiempos de la prehistoria contra los zurdos, cuando aún ni se soñaba con el internet o los celulares, que hoy se apropian de nuestras vidas. El terror se imponía con el objetivo de evitar, por la vía del miedo más absurdo e irracional, que alguien de izquierda, o “zurdito” pudiera llegar al poder.
Sin embargo, en la actualidad los políticos identificados con esa fracción en nuestro país son los que buscan generar el terror, caos, desorden, etc. Los Fernando Lugo, Sixto Pereira, Hugo Richer, Esperanza Martínez, entre muchos otros siempre están detrás de cualquier movilización de reclamo al Gobierno de Horacio Cartes, aunque ellos lo niegan.
Es que ellos quieren seguir mostrándose como los “santitos”, como los impolutos, pero como hoy por hoy, gracias a las redes sociales, en general, nadie se traga esos cuentitos. En este tiempo se sabe todo, ya nadie compra espejitos.
Y volviendo a lo que no quieren ver, ni oír, vale enfatizar un informe que dio a conocer, hace unos días, el ministro de Obras Públicas, Ramón Jiménez Gaona. Destacó que produce satisfacción analizar y comprobar que los proyectos de infraestructura que tienden a mejorar la calidad de vida de la población, van tomando forma y pasan de los simples discursos y proyectos a hechos más concretos.
No es la única secretaría del Estado que muestra significativos avances, pero como muestra basta un botón. Aseguró que 201 contratos de obras se encuentran en ejecución en todo el país, los que ascienden a 1.397 millones de dólares. Asimismo se refirió a los 42 contratos de obras en ejecución para la pavimentación asfáltica de 1.895 km de rutas. “Esto representa el 35% de todas las rutas que se hicieron en 40 años”, sostuvo Jiménez Gaona.
Agregó que para fines de este 2016, a poco más de 3 años de gestión, este Gobierno habrá realizado llamados a licitación de obras de infraestructura por valor de 5.117 millones de dólares, a ser financiados con fondos tradicionales, bonos soberanos, recursos del Tesoro, vía Ley de APP o vía Ley llave en mano.
“Este monto supera ampliamente la gestión de los gobiernos de los últimos 20 años juntos”, puntualizó. Sin embargo, el secretario de Estado remarcó: “somos conscientes de que hay mucho por hacer y lo que estamos haciendo era un compromiso con la gente y un desafío”.
Y por cierto, nada de populismo en las expresiones de Jiménez Gaona, porque es fácil comprobar, uno puede juzgar según lo que vive y en este caso con el permiso de los lectores, quiero hablar de lo que observo frecuentemente. Aquí en Roque Alonso salgo hacia Limpio me encuentro con el gran emprendimiento del ensanchamiento de la Ruta III y la construcción viaductos. Me dirijo hacia Fernando de la Mora, me encuentro con la ejecución del súper viaducto en Autopista y Madame Linch.
Viajo a Caazapá, mi pueblo natal, observo la reparación y ampliación de la Ruta Ñumi- Caazapá. Soy también testigo de la gran movilización en el asfaltado de la Ruta VIII, Caazapá-Yuty y avance de los trabajos en el tramo Maciel (Caazapá)-Iturbe (Guairá). Nunca antes se vio tantos emprendimientos del MOPC como en este Gobierno.
Y así como están las cosas, Ramón Jiménez Gaona se perfila para un nuevo récord, ahora ejecutando obras. Antes fue recordista sudamericano de lanzamiento de martillo y recordista nacional de disco. Hoy para él “obras son amores y no buenas razones”.
