ASUNCIÓN.- El periodista del Grupo La Nación, Richard Moreira, enviado a San José de Costa Rica, remarcó que los jueces de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) no se parecen para nada a los magistrados paraguayos. Sostiene además que no se dejarán presionar y actuarán con absoluta imparcialidad.
“No les va temblar las manos, si van condenar al Estado Paraguayo o para el sobreseimiento”, enfatizó.
De alguna manera se refirió a la participación del presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, en la audiencia y que además, previamente se entrevistó con los jueces de la Corte. “Yo creo que fue recibido a modo de cortesía, pero de ninguna manera puede ser una presión para los magistrados o sobre las deliberaciones en la audiencia”.
Remarco Moreira que la sentencia será absolutamente imparcial, sin presión y desprendidos de toda influencia. Y por sobre todas las cosas, “nada de improvisación, porque están muy bien informado de la causa”, sentenció.
Por otra parte, el presidente Mario Abdo Benítez estuvo presente en la audiencia acompañado de su esposa, Silvana, y del canciller, Luis Castiglioni. Al concluir la audiencia, que duró 10 horas, respondió a la consulta sobre el monto solicitado por Juan Arrom y Anuncio Martí, que podría alcanzar los 100 millones de dólares, se apoyó en las declaraciones de uno de los integrantes de la Corte Interamericana y manifestó: “Así como al juez no le calza que pidan 50 millones de dólares, a nosotros tampoco”. La reflexión fue del juez chileno Eduardo Vio Grossi, vicepresidente de la Corte Interamericana, quien cuestionó un resarcimiento, una reparación “simbólica” de 50 millones de dólares “no le calza”, porque “no es ni justo ni simbólico”, señaló.
También Abdo Benítez señaló: “Conocemos a profundidad este proceso histórico” y que el objetivo de esta demanda “siempre fue el dinero”, expresó.