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El anuncio de que el presidente electo, Mario Abdo Benítez, nombrará a Nicanor Duarte Frutos como director de la Entidad Binacional Yacyretá, echa por tierra el discurso de los añetete de que los expresidentes solamente podían ser senadores vitalicios. ¿Qué le van a decir a Horacio Cartes cuando, después del 15 de agosto, reclame su banca por haber sido electo por casi 800 mil electores?
ASUNCIÓN.- Según la forzada interpretación defendida por algunos senadores del Movimiento Colorado Añetete, en coincidencia con la oposición, los expresidentes de la República solamente pueden ser senadores vitalicios, lo que significa que tienen prohibido ocupar cualquier otro cargo en la Administración Pública.
Sin embargo, de repente surge la información de que el presidente electo, Mario Abdo Benítez, no solamente le ofreció a Nicanor Duarte Frutos que lidere el equipo de transición de la Entidad Binacional Yacyretá, sino que lo nombraría director de la misma a partir del 15 de agosto.
Esto echa por tierra todo el argumento esgrimido por los añetete que no movieron un dedo para solucionar el terrible despelote que armó Fernando Lugo cuando era presidente del Senado, al tomar juramento de Rodolfo Friedmann y Mirta Gusinky, en lugar de Horacio Cartes y Duarte Frutos, a pesar de que los primeros no fueron ni electos ni proclamados.
Es cierto que la incoherencia en torno a Nicanor no es nueva, puesto que en el 2008, los mismos que impidieron que pudiera jurar como senador activo, sí le prestaron acuerdo constitucional para que fuera embajador en Argentina. Así que lo de su senaduría vitalicia está más que pisoteada, y no por él, sino por quienes llevan años evitando que pudiera ocupar su banca en el Legislativo.
Lo único que ahora podemos preguntarnos es qué le dirán a Cartes cuando reclame su banca, para la que fue el senador más votado, por casi 800 mil paraguayos. ¿Será que a Abdo Benítez se le ocurrirá ofrecerle también un cargo para “contentarle”? Eso será para alquilar balcones, porque estamos convencidos de que, a diferencia de Nicanor, Cartes no se dejará tentar por algún caramelito de consuelo. Él fue electo y proclamado senador y se siente con todo derecho a reclamar su banca.
