ADN Digital
Artículos relacionados
Familiares y compañeros de trabajo del chofer de la Línea 12, Diego Suares, fallecido el pasado viernes tras un choque contra la línea 20, comentaron que el hombre padecía afecciones cardíacas. El cuerpo no fue sometido a una autopsia. Por su parte, César Ruiz Díaz, titular del Centro de Empresarios del Transporte de Pasajeros del Área Metropolitana (Cetrapam), dijo que las cámaras instaladas en el siniestrado bus serán claves en la investigación.
ASUNCIÓN.- Hasta ahora nadie encuentra explicación al motivo por el cual el ómnibus de la Línea 12 cruzó la calle Humaitá (preferencial) a una alta velocidad, a pesar de haber inclusive una señal de “pare” en la esquina de Nuestra Señora de la Asunción. Esto derivó en el choque que acabó con la vida del chofer de la mencionada empresa, y una niña de solo 2 años.
Los familiares y compañeros de trabajo de Diego Suares mencionaron que el hombre padecía de afecciones cardíacas, por lo que surgió una nueva hipótesis de que podría haber sufrido un infarto, que le pudo impedir mantener el control del ómnibus al alcanzar la esquina en donde terminó impactando contra la unidad del transporte público de la Línea 20.
El forense Pablo Lemir confirmó que al cuerpo del hombre no se le practicó una autopsia, que hubiera confirmado o descartado esta hipótesis. De esta manera, prácticamente desmiente a la fiscala del caso, Silvia Cabrera, quien antes sostuvo que se realizó la inspección del cuerpo.
El cadáver del chofer ya fue entregado a sus familiares, por lo que ahora se dificulta realizar la revisión forense.
Lemir señaló que están a tiempo de proceder con el estudio si lo determina el Ministerio Público, pero los resultados ya no serán los mismos que si se hubiera hecho en el día de la muerte.
Los antecedentes revelan que además de Suares, resultó víctima fatal del accidente la pequeña Lady Belén Portillo de solo 2 años y 3 meses de edad. Por otro lado, Óscar Giménez, un peatón que estaba en la esquina donde ocurrió el accidente, se salvó de milagro.
LAS CÁMARAS SERÁN FUNDAMENTALES
Por su parte, César Ruiz Díaz, titular del Centro de Empresarios del Transporte de Pasajeros del Área Metropolitana (Cetrapam), señaló que las cámaras instaladas en el siniestrado bus de la Línea 12 serán clave en la investigación del accidente que se cobró la vida del chofer y una niña de tan solo dos años. “A lo mejor el conductor tuvo problemas de salud”, apuntó.
El empresario reconoció que en un análisis rápido puede evidenciarse la imprudencia del conductor de la unidad de la empresa Magno S.A. Sin embargo, aclaró que no puede descartarse que el chofer haya tenido algún problema.
“Los accidentes ocurren tal vez por impericia, pero solamente la investigación va a determinar qué pasó en el habitáculo de ese vehículo. El colectivo (el de la Línea 12) tiene cuatro cámaras en su interior y -según la información que tengo, una de las cámaras apunta al conductor”, puntualizó el titular de Cetrapam.
Ruiz Díaz resaltó que actualmente sólo resta esperar que la Fiscalía retire el DVR (Digital Video Recorder, grabador). Así se podrá determinar qué sucedió en el habitáculo de ese vehículo.
