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ASUNCIÓN.- La Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) estuvo integrada inicialmente por Bolivia, Guyana, Surinam, Uruguay y Venezuela; más tarde se acercaron cinco naciones más, que hoy suspendieron sus participaciones, al punto de impulsar la creación de un nuevo equipo, el G5.
La pretensión de Unasur, en sus inicios, a manos de Néstor Kichner, desaparecido expresidente de Argentina, era “construir una identidad y ciudadanía suramericana, y desarrollar un espacio regional integrado”, objetivos que según el vicecanciller paraguayo, Hugo Saguier Caballero, “nunca resultó, porque fue infectado por el virus de la ideología”.
El organismo surgió en 2008 con la firma del Tratado constitutivo de Unasur, el cual entró en vigor en 2011. Estuvo integrado originalmente por los doce Estados independientes de América del Sur, cuya población conjunta de más de 400 millones de habitantes representaba el 68% de la población de América Latina.
En abril de 2018, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú decidieron suspender su participación en el organismo por tiempo indefinido, debido a la falta de “resultados concretos que garanticen el funcionamiento adecuado de la organización”.
Cuatro meses después, Colombia anunció su salida definitiva y en marzo de este año Ecuador también se le sumó y exigió la devolución de la sede que funcionaba en su territorio.
El presidente pro tempore actual es Evo Morales, presidente de Bolivia, quien junto a Tabaré Vázquez de Uruguay y Nicolás Maduro de Venezuela continúan en el organismo.
