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De acuerdo con el informe de la Dirección de Terapias del Ministerio de Salud, a nivel país se cuenta con 300 camas de cuidados intensivos, que representa solo el 50% de lo requerido por las normas internacionales. En la actualidad, están en funcionamiento 282 camas con UTI, en neonatología se dispone de solo 72 lugares. Esto equivale a una cama por cada 23.000 habitantes. En el sector privado, se cuenta con 212 terapias intensivas de las cuales 90 son para niños.
ASUNCIÓN.– La doctora Leticia Pintos, directora de Terapias, manifestó que existe un gran déficit dentro de Salud Publica en cuanto a la disponibilidad de camas de terapias intensivas que debe ser revertido. “El Ministerio de Salud tiene 300 camas de terapia intensiva en 34 hospitales. De las cuales 142 son para adultos, 56 para pediatría y 80 para neonatología. Las normas internacionales exigen que el 10% de las camas de hospitalarias deban ser para terapia intensiva. Nosotros cumplimos solo el 50% de lo exigido por la OPS. Debemos duplicar eso”, remarcó.
Mencionó que actualmente existen “282 camas de terapia que están funcionando a nivel país y para neonatología tenemos habilitados 72 lugares funcionando”, dijo Pintos.
La directora manifestó que existen muchas falencias en el sistema de Salud Pública que impiden el buen funcionamiento de los equipos y por ende dificulta el servicio. “Tenemos muchas falencias en equipos que no funcionan. Se reparan 10 y se descomponen 5. Repararlas lleva más o menos un mes, dependiendo del caso, porque existen procesos que se deben cumplir y muchas veces prolonga la reparación de los equipos”, señaló.
Añadió que con la disponibilidad de camas en el país, una cama equivale para 23 mil habitantes.
La doctora Pintos resaltó que en los hospitales privados se cuenta con 212 camas, de las cuales 90 están destinados para neonatología.
A nivel país, el Chaco no cuenta con camas de terapia intensiva. “En la Región Oriental tenemos en todos los hospitales de cabecera, excepto en Pedro Juan Caballero, se había habilitado pero el edificio tiene fallas. Cuando esté habilitado vamos a disponer de 10 camas más”, resaltó.
Indicó además que otras de las falencias para la habilitación del servicio es la disponibilidad de personal preparado. “Es fácil conseguir los equipos, pero es difícil conseguir el personal capacitado para manejar las terapias. Las unidades de terapia están conformadas por un jefe, médicos de guardias y un jefe de sala. Ambos jefes deben ser especialista en terapia, entre los médicos de guardia en 80% deben ser especialistas, hasta ahora se cumple con eso”, enfatizó.
