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Fueron 8 los departamentos recorridos por Santiago Peña, en donde se reunió con dirigentes de base del oficialismo colorado en el interior del país. A pesar de alguna resistencia, lo destacable fue el apoyo mayoritario que consiguió al conversar de tete a tete con quienes representan el sustento fundamental del Partido Colorado. Esto hace pensar que su candidatura se consolidará fácilmente en caso de ser confirmada por Honor Colorado.
ASUNCIÓN.- La última reunión fue en Encarnación, justamente el bastión de quien sería el candidato a vicepresidente de HC, el gobernador de Itapúa, Luis Gneiting. Allí se notó a un Peña bastante diferente al de apenas un mes atrás; está más seguro y mucho más convincente. Se mostró firme al ratificar que, de confirmarse su candidatura y de ganar las elecciones del año próximo, está decidido a continuar el modelo político y económico iniciado por Horacio Cartes, porque es reconocido por tener una buena gestión ante el Ejecutivo.
La posible dupla Peña-Gneiting pareciera caer bien a un amplio sector de la dirigencia de Honor Colorado, y a las bases del movimiento en todo el país, fundamentalmente porque la falta de experiencia del ministro de Hacienda es suplantada con creces por la del gobernador, quien es conocido por su larga trayectoria y militancia dentro del Partido Colorado.
Otro dirigente de trayectoria dentro del coloradismo, Juan Schmalko, quien fuera intendente de Encarnación y director paraguayo de Yacyretá, dijo que apoya decididamente a Peña, no solamente porque ese fue el pedido de Cartes, sino porque al estar frente a la EBY le tocó trabajar con el ministro y comprobar su excelente manejo de las finanzas públicas. “Vos sos un ejemplo, Santiago”, le dijo al posible candidato.
Los dirigentes de base saben que, salvo la falta de militancia partidaria, no tienen críticas que hacer a la figura de Peña, quien ha empezado a tener un discurso político mucho más firme. Esto se notó fundamentalmente en Encarnación, donde aseguró que él no tiene experiencia “en la política que lucra con la pobreza”, lo cual es cierto y puede, definitivamente, constituir una de sus principales fortalezas.
