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Es impresionante la variedad y tamaños de los pesebres que se exhiben en la tradicional muestra de la ciudad de Areguá. Uno de los más caros, de G. 7 millones, un pesebre gigante, fue vendido a la Municipalidad de Ñemby y está colorado en la plaza frente al templo San Lorenzo de la ciudad. La Expo continúa y se clausurará hoy.
AREGUÁ (Capital del Dpto. Central).- Los pesebres en exhibición en la Avda. del Lago de esta ciudad son para todos los gustos y posibilidades de los visitantes. Los mismos forman parte de la tradicional Expo, que está llegando a su culminación.
Existen pesebres bien baratos, de 50.000 guaraníes, pero así también están los muy caros, que son los conformados por las imágenes gigantes. Los más grandes cuestan hasta 9 millones de guaraníes. Uno de esos, que están entre los de mayor tamaño, fue vendido a la Municipalidad de Ñemby y fue colocado en la plaza ubicada frente al templo San Lorenzo de la ciudad.
Según los expositores, la venta no llenó aún la expectativa, pero tienen esperanza porque en estas últimas horas haya mayor movimiento. De todas maneras, sostienen que no se pueden quejar, “solamente que queríamos vender un poco más”, dijo Manuela Franco, artesana de Estanzuela.
Por su parte, Ramón Giménez, quien vendió el pesebre gigante, de G. 7 millones, sostuvo que él ya está muy conforme.
Esta Expo Pesebre busca promover la artesanía nacional, brindando espacios gratuitos a artesanos, no solamente de Areguá, sino a los que llegan de diferentes puntos del país.
Hay que destacar que esta capital departamental ofrece, aparte de los pesebres, accesorios para la decoración de los mismos, así como planteras, imágenes diversas, entre otros.
La organización de esta actividad está a cargo del Instituto Paraguayo de Artesanía (IPA), contando con el apoyo del Ministerio de Industria y Comercio (MIC) y la Municipalidad local.
En otras partes de la Gran Asunción se tornan ya tradicionales las ventas de los pesebres en esta época. Por ejemplo sobre la Ruta Transchaco, en Loma Pytã, en el acceso al Centro de Mariano Roque Alonso y en la rotonda del desvío a Puente Remanso.
Los vendedores están apostados en esos lugares las 24 horas y en las veras de esta transitada arteria, de acceso a nuestra capital, desde la zona Norte del país.
Son muy atractivas las réplicas de los “establos”, que recuerdan el sitio de nacimiento del Niño Jesús. Algunos son conformados por bien coloridas imágenes, con detalles en variadas técnicas, como en relieve brilloso, gracias al barnizado.
DIECIOCHO AÑOS DE TRADICIÓN
Una de las costumbres que se está perdiendo en ésta época, tiene relación con los pesebres vivientes. Sin embargo, en el Instituto Pedagógico Nihon Gakko ya tiene una tradición de 18 años y se mantiene bien vigente y cada vez más fortalecida.
De nuevo este año, la imagen del Niño Jesús, rodeado de la Virgen María, San José, fue recreada con mucha emoción. El objetivo de la presentación es transmitir el mensaje de paz y amor a todas las familias paraguayas, buscando mejorar la calidad de vida, alcanzar la excelencia y la felicidad, según un informe difundido los directivos de la institución educativa.
Vale recordar igualmente que el coro del Nihon Gakko es conocido por sus interpretaciones de los villancicos navideños, recorriendo diversos sitios para difundir los mismos.
Los protagonistas del pesebre vivientes fueron niños y niñas del 1ºciclo y 2ºciclo. Ellos, a más de los miembros de la Sagrada Familia, hicieron de los ángeles, los pastores, los reyes magos y algunos animalitos, también representados por los alumnos de la institución, acompañados por algunas madres.
