ADN Digital
Artículos relacionados
Un grupo de senadores de diferentes bancadas presentó al pleno de la cámara un proyecto de Resolución por el que se suspende a Paraguayo Cubas por 60 días sin goce de sueldo, como consecuencia de los hechos ocurridos el miércoles pasado durante una reunión de comisión. Enrique Bacchetta fue el primero en denunciar a su colega y pidió tomar medidas antes de que ocurriera algo peor. La nota tuvo entrada y fue girada a comisiones.
ASUNCIÓN.- Tal parece que la idea de pedir la suspensión de Cubas surgió luego de que Bacchetta pidiera algún tipo de medida en contra suya, ya que la nota de referencia fue presentada fuera del estadio de asuntos entrados, lo que generó una pequeña discusión entre quienes pensaban que sí se podía presentar aún y quienes aseguraban que ya estaba fuera de tiempo y debía esperarse la semana próxima. Ganaron los primeros, así que la nota tuvo entrada oficial y girada a comisión.
En una sesión conjunta de las comisiones de Asuntos Constitucionales y Legislación, mientras se analizaban los expedientes de los candidatos ternados a ministros de la Corte Suprema de Justicia, Cubas agredió verbalmente a Javier Zacarías Irún, y luego hizo lo mismo con Bacchetta, lo que generó un enfrentamiento y agresiones verbales de grueso calibre.
En la sesión de ayer, Bacchetta recordó el hecho, diciendo que el origen del problema fue que Cubas rechazó que la reunión de las comisiones fuera secreta, “y está en su derecho, pero tenemos formas de manifestarnos”.
“Cuando el presidente de Constitucionales planteó que salgan los que no eran senadores, hubo una reacción desmedida por parte del legislador, no común pero que estamos acostumbrados al actuar de esta manera. Le faltó el respeto y le trató de todo a Zacarías Irún, me gritó, me desafió, y yo no le tengo miedo a nadie, solo a Dios. Y sinceramente mucho evalué ayer qué iba a hacer y no sabía cómo actuar. Tanta era la agresión verbal y la insistencia que me costó mucho contenerme”, relató Bacchetta.
Siguió diciendo que “la cuestión es que esta actitud es ya peligrosa para los compañeros de la sala. Decimos que él es así, trajo el antisistema. Pero existen reglas de conducta y de convivencia, y uno puede manifestar con educación lo que quiera. (…) Tenemos que esperar que alguien salga lastimado, que alguien actúe de una manera desmedida. Podemos llegar a algo feo en esta cámara, y si bien es cierto que esto vende, le gusta el morbo a la gente, no es la forma con que tenemos que tratar nuestras cuestiones”.
“Todo lo que él hace es hacer política a costa nuestra. Somos un cuerpo de 45 personas y hay una persona que quiere hacer política a costilla de las otras 44. Por qué tenemos que ser víctimas de una persona que quiere tratar de amedrentarnos. Yo no le tengo miedo a este señor. Pero si hoy digo que vamos a tomar medidas con respecto al maltrato de este compañero. Si ayer le hubiese pegado, hoy hubiese tenido una sanción en el Senado”, añadió.
OBVIAMENTE, DESIRÉE A FAVOR DEL “CUATE”
Como era de esperarse, una de las pocas que salió públicamente en defensa de Paraguayo Cubas durante la sesión del Senado fue Desirée Masi, quien dijo que no se puede sancionar a alguien por simples palabras ya que hasta ella dice palabras que a otros no les gusta y viceversa, sin que se piense en ningún tipo de sanción.
Añadió que “si vamos a examinar lo que ocurrió ayer, fueron 3 senadores que se trataron de todo; se dijeron delincuente, drogadicto, etc. etc., así que no corresponde sancionar a uno solamente”.
Según Masi, el problema de fondo es el del Consejo de la Magistratura y su ninguneo al Senado, ya que hasta ahora no ha respondido una nota presentada ante el órgano. “Lo grave es el secretismo del Consejo de la Magistratura, que ni siquiera responde a los pedidos que le hace la Cámara de Senadores”.
Otro que defendió a Cubas y dijo que no votaría a favor de su suspensión fue Hugo Richer, del Frente Guasu. Mientras tanto, su colega Carlos Filizzola solamente cuestionó que se diera entrada a la nota relativa al pedido de suspensión cuando ya no correspondía hacerlo.
“LO MÍNIMO QUE SE MERECE”, REAFIRMÓ PAYO EN SU DELIRIO
Al coincidir en un programa televisivo el miércoles a la noche, los senadores Paraguayo Cubas y Javier Zacarías Irún –quienes a la mañana ya habían tenido un primer enfrentamiento- volvieron a ocurrir incidentes provocados, claramente, por Payo, quien, además de tratar de delincuente al colorado se desprendió el cinto del pantalón y le pegó con el mismo, en un hecho inaudito e increíble.
Seguramente varias de las cuestiones que dice Cubas serán ciertas, pero lo que nadie puede compartir es la forma de expresarlas, ya que no se puede combatir con violencia lo que ha sido impuesto a la ciudadanía a través de acciones violentas.
Pero Payo no piensa igual y cuando se le cuestionó que haya “cintarajeado” a su colega, inmerso en su delirio dijo que “es lo mínimo que se merece”, añadiendo que los cintarazos fueron solamente “pétalos de rosa”.
Y agregó que “este trato se merecen los 43 senadores de la Cámara y espero que este pueblo utilice los cintos, porque los cintos van a ser el símbolo de la revolución en este país”. Suponemos que no dijo 44 porque excluye a Desirée Masi, aunque parece haber olvidado a otros, como el también pedepista Pedro Santa Cruz, o a los 6 integrantes de la bancada del Frente Guasu, que parecieran estar a su favor.
