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El proyecto de Ley que crea el consejo asesor del Sistema Nacional de Jubilaciones y Pensiones, la Superintendencia de Jubilaciones y Pensiones y establece normas de inversión del mismo sistema, obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados a pesar de la oposición de varias bancadas que consideran que la norma es muy peligrosa porque el gobierno dispondrá a discreción el dinero de los jubilados.
ASUNCIÓN.- Tres veces se intentó postergar el tratamiento del proyecto y no hubo caso, ya que una mayoría colorada se empecinó en que fuera aprobado en la sesión de ayer, aunque no hubo aplanadora ya que la bancada colorada se mostró dividida. De hecho, la presidenta de la Comisión de Hacienda, la colorada Cristina Villalba, fue la primera en mocionar la postergación del tema y su vuelta a comisión.
Sin embargo, su correligionario Mario Cáceres, quien fue el principal vocero de quienes estaban a favor de la aprobación, quienes ganaron las tres veces, consiguiendo que el proyecto obtuviera media sanción y fuera remitido al Senado.
De los opositores, el que más insistió en la postergación fue el liberal Víctor Ríos, quien advirtió que una experiencia similar había constituido todo un descalabro en la Argentina.
Cáceres planteó la modificación del artículo que mencionaba la integración del Consejo asesor, órgano colegiado, que, originalmente era compuesto por el ministro de Trabajo, el ministro de Hacienda y el presidente del Banco Central del Paraguay. El colorado planteó que también integren el cuerpo un representante de los trabajadores y uno de los jubilados, lo que fue aprobado, aunque luego se aclaró que lo que integrarán será el Consejo de Inversión, ya que el primero es meramente técnico.
Este proyecto es muy resistido en varios sectores, especialmente entre los jubilados y un sector importante de la ANR. Incluso, el presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara Baja, Ramón Romero Roa, había advertido del peligro que contenía el texto porque no se tiene en cuenta a los verdaderos interesados, que son el trabajador y el jubilado. Incluso, algunos hablan de que esto podría implicar que se perderían las jubilaciones.
Otro de quienes estuvieron a favor del proyecto fue José María Ibáñez, quien dijo que se habían recibido sugerencias de varios sectores, las que fueron tenidas en cuenta e introducidas al proyecto, por lo que no se justificaba ningún aplazo más.
Añadió que en nuestro país hay un sinnúmero de cajas que reciben aportes y que carecen de reglamentación y regulación. “No existen reglas de juego claras; es una deuda que tiene nuestro país para cuidar el dinero de los aportantes”, afirmó.
