WASHINGTON.- La tiritera que nos entra cuando tenemos frío no es más que un mecanismo de defensa, que pone en marcha nuestro organismo, en el que se contraen y relajan, rápida y repetidamente, algunos de nuestros músculos.
Ello viene provocado por nuestro status de seres homeotermos, lo cual hace que la temperatura de nuestro cuerpo se pueda regular y mantener constante.
Con esos espasmos musculares se pretende generar calor y así evitar que nuestros órganos internos bajen de los 37 grados; la temperatura óptima para funcionar perfectamente.
Nuestro cuerpo es una máquina maravillosa con un montón de mecanismos que nos permiten no correr riesgos y mantener nuestra salud. Tiritar significa que estamos demasiado expuestos al frío; pero también tenemos que tener en cuenta que a medida que cumplimos años nuestros sistemas sensoriales disminuyen su capacidad para identificar los cambios de temperatura, por lo que debemos llevar a cabo cuidados extras.