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Los disidentes colorados y los opositores no quieren que el presidente Horacio Cartes pueda volver a competir en las elecciones del 2018, porque “le tienen un cagazo”, según el ministro de Industria y Comercio, Gustavo Leite, quien dijo que ese es el motivo por el cual se apuraron en rechazar la enmienda que permitía la reelección presidencial en la Constitución Nacional.
ASUNCIÓN.- Según Leite, el cagazo que le tienen a Cartes es lo que les llevó a eliminar la posibilidad de enmienda en el Senado. Dijo además que si Fernando Lugo hubiera tenido alguna chance de competir y ganar al jefe de Estado, hubiera votado a favor de la modificación de la Constitución; sin embargo, como no tiene ninguna chance, votó en contra para impedir que el presidente pudiera volver a competir y –posiblemente- ganar, primero en las internas y luego en las generales de 2018.
Aseguró que el temor existe porque el gobierno de Cartes está haciendo bien las cosas y eso queda demostrado en la misma actitud de los opositores, puesto que si fuera cierto lo que publican los medios, de que la situación es caótica, nadie tendría miedo de que se volviera a postular, puesto que sería un seguro perdedor.
Agregó que “si las encuestas dicen que Cartes está haciendo tan mal las cosas, ¿no sería acaso el mejor candidato a enfrentar porque lo está haciendo todo mal? no hay lógica en su raciocinio. No quiero hablar de Lugo porque es una figura del pasado, él debe mantener viva a la izquierda y es la única figura de ese grupo ¿Quién no se divirtió alguna vez en el carnaval? da gusto el carnaval pero no es sostenible, no se puede vivir del carnaval”.
Lo mismo manifestó en contra del líder de la disidencia colorada, Mario Abdo Benítez, quien también tiene aspiraciones presidenciales y no quiere que su rival sea Cartes. “El Paraguay está funcionando. No está funcionando a lo mejor como todos queremos, pero estamos trabajando. La gente de afuera, que antes se ocupaba de hablar mal de Paraguay, ahora se ocupa de admirarnos”, añadió.
“Los supermercados son el pulso de la economía, y si crecieron 25% en los últimos tres años podemos decir que la economía está sana. ¿Por qué antes se hablaba mal de Paraguay y ahora bien? El Paraguay de hoy es servicio y no como ante “servirse” de lo que hace el Gobierno es crear condiciones para que el que quiera trabajar, pueda salir adelante”, dijo finalmente.
