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YGUAZÚ.- Alto Paraná.- La fiscal Mónica Larroza, imputó a Gilda María Ortega Peña por la presunta comisión del hecho punible de frustración de la persecución y ejecución penal y resistencia. En tanto que a Julio César Ortega Peña por exposición a peligro del tránsito terrestre y resistencia. También se investiga a Alberto Miguel Ortega Peña y Simón Alcaraz por resistencia.
La representante del Ministerio Público solicitó la prisión domiciliaria para la mujer, mientras que para los demás imputados pidió medidas alternativas.
Refieren los antecedentes que en fecha 8 de enero de este año, Julio César, sargento del Ejército y con orden de captura por violencia familiar, fue detenido junto a los demás imputados.
La aprehensión se produjo después de que atropellaran la comisaría 9ª de Yguazú, donde amenazaron de muerte a los agentes policiales de guardia. Según trascendió, se molestaron por un procedimiento que realizaron los uniformados tras una denuncia radicada por los vecinos, quienes se quejaron de los ruidos molestos que ocasionaban los hoy imputados desde una camioneta.
Todos ellos estaban en la vía pública del km 42, escuchando música a alto volumen en una camioneta Nissan Terrano. Cuando los agentes del Orden se trasladaron hasta donde estaban para pedirles que se retiren del sitio, los mismos aseguraron que así lo harían.
Minutos después y bajo total estado de ebriedad se trasladaron hasta la sede policial, donde Julio César descendió, refirió que era militar y que tenía un arma de fuego en su rodado, con que ultimaría a tiros a los policías. No contento, advirtió que prendería fuego a la dependencia policial. Los afectados pidieron refuerzos a otras comisarías y procedieron a privarlos de libertad.
