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Los productores oficialmente no analizan alternativas hasta que se desactive el proyecto de impuesto a la exportación, que en este momento está en el Senado. No quieren sorpresas. Héctor Cristaldo, presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), explicó que este impuesto beneficiará solo a los agroexportadores porque se quedarán con el 50% del gravamen que retiene de los productores. Explicó que si entregan 100 kilos, procesan 50 y quedan exentos y solamente pagan el restante 50%. “Este gravamen es el único del mundo que divide al aporte del productor, mitad para el Estado y mitad para las multinacionales”, dijo Cristaldo.
ASUNCIÓN.- Los productores insisten en dos puntos relacionados al estudio de la Ley que grava a exportación de soja presentado por el Frente Guasu. La primera, que es confiscatoria, y perjudicará a toda la producción y solo beneficiará a los agroexportadores y como segundo punto “en el fondo no les interesa (al Frente Guasu) el impuesto; solo les interesa reposicionarse y ganar presencia mediática porque de esta manera hacen campaña gratuita”, dijo Héctor Cristaldo, directivo de la Unión de Gremios de la Producción (UGP).
“Este impuesto que están aprobando, lo que hará es lo siguiente: dicen que va a generar US$ 200 millones que el productor pagará y de ese monto quedará US$ 100 millones a las transnacionales y llegará US$ 100 millones al Estado, será el productor el que pagará los US$ 200 millones. Es lo más simpático de este impuesto, no sabemos de qué protección al productor hablan”, acusó Cristaldo.
Supone que este gravamen creara un nuevo escenario en el que las multinacionales y el Estado se dividirán el aporte del productor, “van a castigar al sector y van a fondear a las multinacionales. Ese 50%, del 100% que pagó el productor quedará en manos de cuatro o cinco agroexportadoras”, dijo el entrevistado.
Aclaró que el procedimiento para quedarse con el 50% de la retención al vendedor (productor) es la manufactura de una parte de los granos depositados en los silos. Cristaldo explicó que “se transporta al silo de las transnacionales; se entrega 100 mil kilos y liquida y retiene impuestos por esos 100 mil kilos; el silo envía a Villeta a su fábrica y procesa 50 mil kilos y lo exporta procesado y eso no paga nada, está exento de impuestos y luego solo paga impuestos por 50 mil kilos que exportó en granos; pero se queda con la retención que pagó el productor”, afirmó.
Asegura que este tributo es una confiscación a la producción “no es un impuesto a la ganancia, es un impuesto que confisca la producción porque saca de lo producido bruto, el 10% o 15% y eso es confiscación. Se puede producir 3.000 kilos y ganar y como ocurrió en el 2012 se puede producir 10.000 o 12.000 kilos y se perdió, pero igual se debe aportar el 15%”.
ELECTORALISMO
En su análisis, Cristaldo destacó que “nosotros debemos seguir trabajando y no podemos estar al arbitrio del capricho de gente que hace campaña proselitista con esto, tal como lo está haciendo el Frente Guasu que hasta hace poco no tenía ni 10 centímetros de mención en los medios y hoy están como locos con este tema”.
Sentenció que “en el fondo no les interesa el impuesto, solo les interesa reposicionarse y ganar presencia mediática porque de esta manera hacen campaña gratuita”.
NO ANALIZARÁN OTRAS ALTERNATIVAS HASTA “DESACTIVAR BOMBA” DEL FG, SOSTIENEN
Los productores asumen que antes de pensar en un proyecto alternativo primero deberán desactivar el que grava a la exportación. Héctor Cristaldo, presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), explicó que “la bomba está activada, con una mecha encendida y no sabemos cuan larga es y no podemos sentarnos a hablar de otra cosa y hasta corremos el riesgo que salgan ambos impuestos. Intentemos desactivar una y luego vemos que hacer” y agregó que mientras esté en proceso legislativo el impuesto que grava la exportación es difícil que la gente tenga cabeza para pensar en otras opciones porque se siente amenazada”.
El Ministerio de Hacienda realizó una propuesta en reunión de prensa y hasta el momento no lo hizo oficialmente y en esta circunstancia “será difícil opinar, es un planteamiento que no existen oficialmente, solo lanzado a nivel de prensa y no está aún en los papeles formales”, significó.
El fin de semana pasado la ministra de Hacienda, Lea Giménez, invitó a una mesa de diálogo a todas las partes involucradas para “crear una propuesta razonable de gravamen al sector agropecuario y consensuada entre todos los sectores”. Un proyecto surgido de esta secretaría de Estado es elevar el IVA Agropecuario del 5% al 10% y reformular el IRAGRO.
Sobre el particular, Cristaldo se excusó a dar alguna opinión a profundidad. “A mí no me deben convencer de nada. Cuando llegue el momento me sentaré con la gente a evaluar las propuestas y luego transmitir la determinación de la totalidad de los productores. Pero antes de eso no podré decir mucho”, dijo el hombre de campo.
Insistió en que con la vigencia del proyecto del Frente Guasu no están en condiciones de analizar otro proyecto “y entendemos que en estas condiciones será bastante difícil que los productores nos autoricen a los dirigentes nos sentemos a negociar otra salida”.
