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El diputado Arnaldo Samaniego, autor del proyecto denominado “Ley Vierci”, y su colega Ramón Romero Roa, uno de los firmantes, juegan a las escondidas ante la ciudadanía, pero por otra parte intenta acelerar su estudio y sanción en la Cámara Baja. Esta actitud llama la atención como también que no proponga consultas a organismos directamente involucrados del sector privado. La normativa tiene por objetivo entregar al “Grupo Vierci” el control de las telecomunicaciones. Congresistas y gremios que aglutinan a empresas y trabajadores vinculados a medios exigen audiencias públicas para debatir el alcance del proyecto. La diputada colorada Cristina Villalba, una de las proponentes del proyecto, decidió retirar su firma ante la actitud de su colega Samaniego.
ASUNCIÓN.- La premura y el “secretismo” del proyecto impulsado por un grupo de diputados llama poderosamente la atención. La experiencia legislativa casi no registra el “desinterés” del proyectista como se da en este caso, el de explicar que busca el proyecto y en que fortalece al Estado. El pasado 23 de este mes apareció en mesa de entrada un documento que crea un Ministerio de Comunicación y el responsable Arnaldo Samaniego desaparece.
Tampoco muestra señales el segundo proyectista, su correligionario Ramón Romero Roa (ANR – Alto Paraná) y hasta el momento no explican de que se trata el plan. Lo que sí se sabe es que otorga superpoderes al futuro ministro de Sicomm, Alejandro Peralta Vierci, mano derecha y hombre fuerte del empresario Antonio J Vierci.
Legisladores, exdirectores de entes, periodistas y ciudadanía están ávidos de entender el proyecto real. Existen aspectos oscuros en el plan que deben ser explicados.
Lo que sí se demuestra es la premura para que se trate y se apruebe la “Ley Vierci” y hacen “pito catalán” a los reclamos de organizaciones civiles directamente afectadas para que se abra una mesa de conversaciones y debatir los alcances del proyecto. Hasta el momento, los diputados no llaman a una audiencia pública para explicar los alcances del proyecto.
El plan pretende la creación del Ministerio de Comunicación y Tecnologías de la Información (Micotic), y absorber los entes Sicom, Senatic, Conatel y Copaco, los tres últimos considerados estratégicos en la política comunicacional y de tecnología del Estado.
Ante el silencio de los proyectistas se sospecha que fueron otras personas quienes elaboraron el documento y Samaniego y otros diputados lo firmaron. Si se confirma es aún más grave. Se suma al escenario, el caso del diputado del PLRA, Antonio Buzarquis, quien firmó en el proyecto presentado sin saber de qué se trata. Accedió a rubricar el documento a pedido de su colega Arnaldo Samaniego.
La aparición de este proyecto coincide con la designación de Alejandro Peralta Vierci como futuro ministro de Sicom, y según el diputado colorado Justo Zacarías Irún “esta situación agrava la pretensión de reducir los entes reguladores de las telecomunicaciones en manos de una persona vinculada a los medios”. Peralta Vierci fue hasta hace poco tiempo mano derecha de Antonio J Vierci en el manejo del conglomerado de medios que posee el grupo.
Las sospechas indican que Peralta Vierci cruzó la vereda del sector privado al público con la carpeta bajo el brazo, conteniendo el proyecto y lo primero que logró es convencer al presidente electo, Mario Abdo Benítez, quien apoya la creación de este ministerio en las condiciones mencionadas.
Los funcionarios de Copaco y Conatel también exigen algunas respuestas y se pronunciaron al respecto y anuncian movilizaciones porque temen que al producirse la fusión queden desvinculados de sus lugares de trabajo.
