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El proyecto de convertir la ANDE en un ente regulador de generación, distribución y venta de energía y privatizar el servicio, es una cuestión cíclica que no tiene mucho sustento técnico que lo estaría haciendo prácticamente inaplicable. El propósito lo plantearon los diputados Carlos Núñez y José María Ibáñez, ya en abril pasado, y fue reflotado buscando apoyo político. En la Cámara Baja lo volverán a presentar en dos semanas. La tendencia en Diputados apunta a enviar el proyecto al archivo.
ASUNCIÓN.- Los representantes Carlos Núñez Salinas y José María Ibáñez son los responsables del proyecto de ley General de la Industria Eléctrica que crea la figura de Órgano Regulador de la Administración Nacional de Electricidad (Ande) y acondiciona un plan de desmonopolización de la estatal.
Una parte de la exposición de motivos destaca que “busca el desarrollo del sector eléctrico paraguayo utilizando la energía eléctrica como una herramienta para el crecimiento del país y, por el otro, la protección irrestricta de los derechos de los usuarios que hoy no existe”.
Núñez dijo a nuestro diario que “con este ente regulador se va a dar una serie de reglas y estándares de calidad que las empresas estatales y privadas van a tener que cumplir para asegurar la calidad del suministro”.
Este documento ya fue presentado en abril pasado, pero no tuvo éxito en el pleno por lo que sus autores lo devolvieron a laboratorio y después de introducir al pleno irá a comisiones para cambios al proyecto.
SIN FUTURO
El proyecto podría tener la misma suerte de otros que ya fueron estudiados en Diputados. Una fuente de la mesa directiva de la Cámara Baja dijo a ADN que “el proyecto no tiene futuro; intentar convertir la ANDE en un ente regulador y desmonopolizar el servicio es casi imposible, y no por la burocracia sino por los recursos que exigirá”.
El proyecto pretende que cada ciudad de la República tenga su propia empresa de provisión de energía “y solo este tema lo hace totalmente inviable; es un proyecto traído de los pelos, imposible de aplicarlo”, destacó nuestra fuente que está identificado por nuestro diario pero pidió mantener su nombre en reserva.
Una de los argumentos de uno de los proyectistas es una consulta: “¿Cómo puede ser que los ciudadanos de Ciudad del Este y Encarnación paguen la misma tarifa que aquellos que viven a 200 o 300 kilómetros de las hidroeléctricas?”; sin tener en cuenta, quizás que no son las hidroeléctricas las que sirven y la venta no será a la empresa alguna, sino a la Ande, sea esta reguladora o distribuidora.
Además de Núñez e Ibáñez, se reunieron para estudiar el proyecto sus colegas Ramón Romero Roa, Atilio Penayo y los asesores técnicos Nelson Cristaldo y Carmelo Núñez.
YA INTENTARON ANTES
No es la primera experiencia, la de intentar desmonopolizar la ANDE. Una anterior fue impulsada por el exdiputado Justo Zacarías Irún, hoy gobernador de Alto Paraná. El mismo había presentado un proyecto similar con la intención de crear condiciones de privatización de la venta de energía elevando al ente estatal a la condición de regulador.
Zacarías, ingeniero electricista de profesión planteó al proyecto cuando ejerció la diputación por el décimo departamento bajo el mismo argumento de los diputados que hoy plantean el ante proyecto. Mencionó que el “grave problema de energía que tiene el Paraguay está en la distribución, a pesar que se deben mejorar las líneas de transmisión”.
Por entonces estaba en juego un crédito de US$ 100 millones para la ANDE, monto que debía ser destinado a inversiones para resolver cortes de energía y que de ser aprobado el proyecto se lo iba a administrar de una manera diferente. El plan Zacarías no prosperó.
