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ASUNCIÓN.- En ámbitos de empresas que comercializan combustibles, dan como un hecho la suba de las naftas y diesel, a raíz del impacto que generará la vigencia del Impuesto Selectivo al Consumo, prevista que arranque desde el 1 de enero.

El gerente de Dicapar, Guillermo Parra, expresó a periodistas que desde el gremio de Distribuidores de Combustibles Asociados del Paraguay precisan sentarse con referentes del Ejecutivo, para negociar posibles soluciones que planteará el problema de la suba impositiva.

Los importadores sostienen que el aumento de los gravámenes sobre los carburantes representará un impacto negativo en los consumidores, así como desencadenará un incremento de la inflación.

El jefe del Ejecutivo Mario Abdo Benítez, firmó el decreto el 19 de diciembre pasado. El documento expresa un aumento a los impuestos sobre el precio de las naftas, entre 500 y 1.500 guaraníes, mientras que, para el diésel entre 100 y 500 guaraníes, desde el común hasta el más refinado.

De darse el aumento de precios a los combustibles, será un hecho que los transportistas también declaren el aumento del precio del pasaje.