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La acusación mutua entre los precandidatos a la Cámara de Diputados de Colorado Añetete por el Alto Paraná, Magno Álvarez y Ulises Quintana, cada vez más se vuelve al rojo vivo, ya que en la reunión convocada por el precandidato a la Gobernación del Alto Paraná, Roberto González Vaesken, no se logró poner ni siquiera el “paño tibio” al conflicto, tal cual pretendió hacerlo el aspirante al gobierno departamental. Las rencillas internas no fueron subsanadas en Añetete, lo que le ocasiona nuevas fugas en este movimiento.
CIUDAD DEL ESTE.- Esta situación produjo el desbande de la dirigencia de base de este sector a otras carpas, hecho que repercute negativamente en la precandidatura de González Vaesken, que intenta por todos los medios brindar una imagen de unidad en sus filas, situación que a 13 días de las elecciones es imposible de recomponer.
Acusaciones personales y hasta económicas afloraron en la reunión convocada por Vaesken, cuya finalidad precisamente fue la de bajar el nivel de fricciones existente en Colorado Añetete del Alto Paraná. Desde que el líder de este sector interno de la ANR, Mario Abdo Benítez, le levantó el pulgar a Magno Álvarez, la pelea interna tomó cuerpo, ya que los roces fueron y siguen siendo permanentes entre éste y Ulises Quintana, quien lidera otro grupo que se atribuye la potestad de ser los fundadores de dicha agrupación política en esta zona del país.
Tanto Álvarez como Quintana disputarán un escaño para la Cámara Baja al que posteriormente se les sumó Mario Concepción Quintana, del tercer frente de Añetete, aunque con un perfil más bajo que los dos anteriores, al que está acostumbrado y es motivo de críticas por parte de sus correligionarios de la ciudad del Presidente Franco, localidad al que pertenece.
La disputa interna en Añetete al parecer no tiene visos de solución, pese al esfuerzo realizado el precandidato a la Gobernación del Alto Paraná, González Vaesken, quien ya bajó la guardia y está trabajando con los tres frentes internos, a pesar de las peleas permanentes.
Los ásperos roces internos entre los precandidatos a la Cámara de Diputados por el movimiento Colorado Añetete, Ulises Quintana y Magno Álvarez, no fueron superados y a días de las pujas electorales, se agrava aún más la situación. En estos días, incluso aparecieron otras denuncias contra el precandidato disidente a gobernador, González Vaesken, quien supuestamente habría ofrecido G. 500.000 a los coordinadores de base de Juan Carlos Barreto, precandidato a la Gobernación por el movimiento Honor Colorado, para pasar a su equipo. Según la denuncia, González Vaesken supuestamente hizo la oferta a dirigentes de las seccionales 5 y 15.
Esta denuncia se suma al conflicto existente entre los dos sectores comandados por Magno Álvarez, por un lado y Ulises Quintana por el otro. Los dos dirigentes se acusan de buscar la desestabilización del equipo regional de la disidencia. Álvarez sostiene que Quintana es “el privilegiado” de González Vaesken, debido a que participa más de las reuniones hechas por Ulises, mientras que éste refiere que “Magno es un paracaidista y que solo busca beneficios personales y no para el movimiento”, dijo. La candente situación interna de Añetete, hizo que algunos dirigentes barriales, cansados de las “peleas caseras”, pasen a las filas de otros movimientos internos del Partido Colorado.
