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ASUNCIÓN.- Enrique Riera, titular del Ministro de Educación y Cultura (MEC), habló sobre los incidentes que se produjeron con los estudiantes durante la segunda marcha de colegios públicos y privados que se desarrolló el pasado viernes 16.
Riera reconoció haber tenido una reacción autoritaria y provocativa durante la marcha donde recibió botellazos de agua, pidió disculpas y dijo que espera seguir dialogando con los alumnos para lograr una mejor educación.
Tras participar de la presentación de mejoras de una escuela en Trinidad, el titular del MEC refirió que, “Fue un momento tenso, delicado, me bajé con intención de dialogar cuando fui agredido y reaccioné. Probablemente no debía haber reaccionado así, quedó un poco autoritario y provocativo”, señaló.
“En otra época nos enfrentábamos a las cachiporras, ahora, a los botellazos y creo que fue una bravuconada que no debía haber hecho pensando que soy un ministro de Educación. A los chicos y a la sociedad les pido disculpas”
El ministro dijo que posiblemente lo traicionó su espíritu del Movimiento Popular Colorado, conocido como Mopoco, un movimiento interno del Partido Colorado, que había sido fundado en 1959, y que luchó contra la dictadura de Alfredo Stroessner. “En otra época nos enfrentábamos a las cachiporras, ahora, a los botellazos y creo que fue una bravuconada que no debía haber hecho pensando que soy un ministro de Educación. A los chicos y a la sociedad les pido disculpas”, expresó.
Durante la movilización estudiantil, el titular de la cartera de Educación provocó a los jóvenes a que le tiren botellas de agua, molesto porque lo llamen “stronista”.
“Sé que se deben poner límites, pero hay formas y esa no fue la mejor manera, pero hay que estar en la cancha, en el momento, en el lugar y entender lo que uno siente cuando es agredido, creo yo injustamente”
Riera aseguró que reflexionó el fin de semana, dijo “Sé que se deben poner límites, pero hay formas y esa no fue la mejor manera, pero hay que estar en la cancha, en el momento, en el lugar y entender lo que uno siente cuando es agredido, creo yo injustamente”. Agregó que reconoce que se extralimitó al mencionar que los estudiantes tendrían un “gigantesco cero” si tenían exámenes y participaban de la marcha.
DIÁLOGO CON ESTUDIANTES
El secretario de Estado indicó que espera reunirse en la brevedad posible con los secundarios, de manera a retomar el camino del diálogo, pues considera que es el único para sacar a la educación adelante.
“Quiero dejar este incidente atrás y seguir trabajando con ellos. Como ministro debo darme cuenta que ya no soy luchador de barricadas desde hace muchos años, los tiempos cambiaron, y a veces no se mide las consecuencias de las palabras”, afirmó.
