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Rusia reforzó los sistemas anti-aéreos desplegados en el extremo oriente del país, en el área limítrofe con Corea del Norte ante la escalada de tensión entre Washington y Pyongyang. Y advirtió que ve un “muy alto” riesgo de guerra entre Estados Unidos y Norcorea. En las últimas horas aumentaron las tensiones por los desafíos que realizan ambos países. El jefe de la diplomacia rusa reiteró que la presencia de armas nucleares en Corea del Norte es “inaceptable”.
KIMBERLI.- El canciller ruso Serguei Lavrov mencionó en una entrevista que ha habido “amenazas directas del uso de la fuerza”.
Rusia y China mantienen las relaciones diplomáticas relativamente más estrechas con el régimen comunista de Pyongyang. Pero ante los reiterados desafíos de Corea del Norte a la comunidad internacional con sus ensayos nucleares y de misiles balísticos, la semana pasada apoyaron las duras sanciones del Consejo de Seguridad contra el régimen comunista.
El ministerio de Defensa ruso precisó que los sistemas anti-aéreos de Rusia en la región “no se hallan en estado de alerta” a pesar de la grave situación imperante en el área con amenazas recíprocas entre Estados Unidos y Corea del Norte.
“Las unidades desarrollan su deber 24 horas sobre 24, en un estado de eficiencia bélica permanente: no hubo ningún pasaje de las unidades anti-aéreas del extremo oriente a los niveles más altos de preparación, dijo el ministerio citado por la agencia de noticias Interfax.
Poco antes, Viktor Ozerov, exjefe de la comisión de seguridad y defensa, dijo a la agencia de noticias Ria Novosti que “lo que pasa ahora en Corea del Norte no puede no suscitar preocupación y nos obliga a tomar medidas adicionales para proteger a nuestro territorio: las fuerzas aéreas y anti-aéreas fueron reforzadas”, indicó.
Entre los objetivos de las fuerzas aéreas está garantizar la seguridad del territorio ruso en caso de coordenadas equivocadas de los misiles norcoreanos porque, según Ozerov, “es bastante alta la posibilidad de error”.
