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ASUNCIÓN.- Por primera vez parece que hay posibilidad de que se inicie un proceso que lleve a la reforma de la Constitución Nacional. La Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado analizará esta semana la creación de una comisión nacional que estudie propuestas para ello, aunque este no es un requisito constitucional.
Hay gente que suele decir que para que algo no se lleve a cabo, hay que crear una comisión que lo analice. Esperemos que esto no sea cierto en el caso de la reforma constitucional, ya que los senadores han decidido conformar una comisión nacional para que estudie los proyectos de reforma constitucional que se presenten, aunque la Constitución, en su artículo 289 pone como únicos requisitos que la reforma sea solicitada por la cuarta parte de los legisladores de cualquiera de las cámaras (12 senadores o 20 diputados), el presidente de la República o 30 mil electores.
Además, la declaración de la necesidad de la reforma deberá ser aprobada por mayoría absoluta de dos tercios de cada cámara y a partir de allí, el Tribunal Superior de Justicia Electoral tendrá 6 meses para llamar a elección de convencionales constituyentes.
Así que en ningún lado se habla de una comisión nacional que analice las propuestas de reforma, aunque esta es una forma de empezar un proceso que ha sido pospuesto por demasiados años en el país.
El impulsor de esta idea es Miguel Ángel López Perito, de Avanza País, quien dijo que la idea es crear una agenda de propuestas que pudieran generar un debate público sobre los puntos que deben ser reformados en la Constitución actual.
Sin embargo, según el legislador, pretende establecer que ningún tipo de cambio constitucional pueda realizarse durante este período y eso es muy ambiguo puesto que ni siquiera se sabe si él mismo, López Perito, podría tener algún tipo de protagonismo en el período siguiente, ni si quienes vengan a partir de 2018 se muestren interesados en las normas que él pretende imponer hoy para aplicar entonces.
Resulta muy claro que lo que realmente pretende López Perito es evitar que se establezca la reelección presidencial en este período. Pero si tanto se teme la posibilidad de que el presidente Horacio Cartes pudiera volver a postularse y ganar unas elecciones, lo que debería hacer es establecer que los cambios que se realicen vía reforma constitucional empezarían a regir en el siguiente período y no en el que está vigente a la hora de que fuera sancionada la nueva Constitución Nacional.
