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ASUNCIÓN.- Aunque el enfrentamiento principal sobre el tema paridad en el Senado parece darse entre las bancadas de Frente Guasu (a favor) y Patria Querida (en contra), la propuesta fue de la colorada Lilian Samaniego y, según su correligionario Sergio Godoy, hay mayoría en la cámara para ratificarse en la inclusión del artículo, que fue eliminado en la modificación de Diputados.
De acuerdo a Godoy, “en el Senado hay votos para ratificarse en tema paridad. Ya anteriormente fue así y no creo varíe”, lo cual es cierto ya que en la sesión del jueves pasado, fue una amplia mayoría la que votó a favor de que las listas que se presenten a competir en elecciones internas estén integradas por 50% de mujeres y 50% de hombres.
Lo que ocurrió en la cámara es que Samaniego planteó algo de lo que no se habló durante los 6 meses de trabajo de la comisión especial que tuvo a su cargo presentar los proyectos de reforma electoral, lo cual cuestionó Georgia Arrúa, del PQ. Ante algo que muchos consideraron un olvido imperdonable, porque con el desbloqueo desaparecería la obligación de que todas las listas estén integradas, en un 30% por mujeres, los senadores apoyaron el planteamiento de la paridad, lo cual significa que las listas para las internas serán integradas mitad y mitad, aunque las que luego compitan en las nacionales, lógicamente, ya no estarán compuestas de esa manera.
Fue lo primero que los diputados rechazaron al recibir el proyecto, ese mismo jueves. El líder de la bancada de Honor Colorado, Basilio Núñez, fue uno de los primeros en expresar su oposición a la paridad, y la mayoría estuvo de acuerdo, por lo que el proyecto fue modificado. Los senadores necesitarán mayoría absoluta de votos (23) para ratificarse. En ese caso, si los diputados insisten en eliminar la participación de hombres y mujeres de manera paritaria, requerirán mayoría absoluta de dos tercios de votos (54).
En el Parlamento actual hay 21 mujeres en ambas cámaras, 12 en la Cámara de Diputados y 9 en el Senado. Nada indica que esto pueda cambiar con la paridad en las listas de las internas, ya que dependerá de los electores ubicar en los primeros puestos a sus candidatos, sean mujeres u hombres.
