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Cristina Bogado, ministra de la Función Pública, encuentra mejor recluirse en su despacho; no explica, no informa nada, no responde a requerimientos periodísticos y hasta el momento mantiene vigente la Resolución que otorga “salariazos” a 31 funcionarios de su institución. Puso en vigencia la “política” de Patricia Samudio, presidente de Petropar, y de Karina Gómez, extitular de Senabico. A esta última le costó el cargo esta actitud y Samudio goza de protección presidencial.
ASUNCIÓN.- El Ministerio de Hacienda frenó los aumentos hasta tener una definición de todas las reparticiones, cuyos funcionarios fueron beneficiados con el “salariazo”, entre ellos los 31 empleados de la Secretaría de la Función Pública (SFP).
Ante esta nueva situación determinada por Benigno López, la ministra de la SFP, Cristina Bogado, adoptó la política de callar; borrarse y con ella toda la información que está obligada por Ley de Transparencia a facilitar.
Esta actitud no es nueva, así también procedieron Patricia Samudio, presidente de Petropar, y Karina Gómez, extitular de Senabico, aunque con suertes dispares, porque la segunda se vio obligada a dimitir ante la fuerte presión ciudadana. En el caso de Samudio, la situación es diferente, pues cuenta con el blindaje de la familia presidencial y el cartel de los combustibles.
Bogado desapareció para los medios de prensa, sobre todo para aquellos que no hacen el juego al Poder Ejecutivo. No informa sobre la actitud adoptada por su ministerio, sobre todo después del fuerte reclamo del ministro de Hacienda.
López determinó que “los pagos de salarios correspondientes a febrero se harán conforme a los datos de diciembre de 2018, esto hasta que se dé una definición a los aumentos, ya que aún faltan reportes de varias instituciones”.
Esta comunicación acabó con la aparición mediática de Bogado, no se prestó a los medios para explicar que hará con la Resolución formada para favorecer a sus funcionarios, pero que termina justificando el aumento para los 2.123 en planilla de varias reparticiones.
En cuanto al procedimiento de Hacienda, su titular adelantó que “el presupuesto es atribución exclusiva del Poder Ejecutivo, y que en esa instancia se da participación al Ministerio de Hacienda, conforme a un plan de gestión y no a través de procesos que se definen en paralelo, como se viene haciendo hace unos años”.
MALA FE
En la última aparición de Bogado, antes del reclamo de López, había explicado que el dictamen que firmó “fue descontextualizado y creo que fue filtrado de Hacienda de muy mala fe, porque es en relación solamente a la Secretaría de la Función Pública, en respuesta a las dos notas que nos habían enviado y notificaciones previamente de Hacienda”, sostuvo la ministra.
