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ASUNCIÓN.- Las fuerzas sindicales de la ANDE se aliaron fuertemente con la dirigencia opositora y la disidencia colorada para trasladar fuera del recinto parlamentario el enfrentamiento al Ejecutivo. Minutos después de la conclusión de la sesión extraordinaria de Diputados, no tardaron en lanzar una velada amenaza. Juan Orué, dirigente de Sitrande, fue bien claro: “seguirán los apagones”, como si esto tuviera algo que ver con los salarios.
La advertencia de Orué fue reforzada. Al anunciar el senador Silvio Ovelar que no se presentarían a la sesión del miércoles para tratar el veto al PGN 2017: “no vamos a sesionar, pero vamos a estar en la trinchera, armados y equipados”.
Existen sospechas en el gobierno de la existencia de un plan para realizar apagones selectivos y en horarios picos y generar de esa manera la reacción del usuario contra el Poder Ejecutivo.
Un comunicado de Sitrande llama a todos los trabajadores sindicalizados afectados al PGN a que se inicien las movilizaciones “para proteger la institucionalidad y el respeto a la Constitución Nacional”, y a renglón seguido se contradice: “se autoriza a los ciudadanos a resistir por todos los medios a su alcance”.
El medio al alcance de los trabajadores de ANDE ya fue anunciado por Orué y eso es inconstitucional.
Una fuente palaciega destacó que “el objetivo es crear el ambiente de más crispación dirigido al debilitamiento del presidente Cartes que al final lo conduzca a un juicio político”
Carlos Amarilla, senador liberal dijo a los medios que “Veremos en su momento qué acciones iremos tomando. El presidente está haciendo méritos sobrados para que, en algún momento, se detone el procedimiento previsto en la Constitución Nacional” haciendo referencia a un posible juicio político cuya raíz serían las movilizaciones supuestamente descontentas por el recorte presupuestario destinado a los salarios.
