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El nivel del río Paraguay sigue creciendo y actualmente están en 7, 25 m, a solo 75 cm del nivel considerado de “desastre” que es de 8m, según el último reporte de la Dirección de Meteorología e Hidrología (DMH), por lo que suman más de 12.500 las familias desplazadas y reubicadas en los refugios temporales repartidos por toda Asunción. Ante esta situación, también aumenta el conflicto en los barrios donde los vecinos no quieren que los afectados se instalen en las plazas.
ASUNCIÓN.- Las aguas del río Paraguay alcanzaron este sábado 7,25 metros en Asunción, es decir aumentó cinco centímetros en las últimas 24 horas, creciendo más de 45 centímetros desde el fuerte temporal del viernes 10 de mayo que afectó a todo el país.
Según el informe hidrométrico elaborado en conjunto por la Dirección de Meteorología e Hidrología y la SEN, el cauce iba a alcanzar una altura máxima de 7.20 metros a principio del mes de junio, sin embargo, esta cifra ya fue superada este sábado.
La Municipalidad informó que suman 12.583 las familias desplazadas por la crecida que se vieron obligadas a abandonar sus hogares desde hace varias semanas. De este total 11.005 familias están ubicadas en los 118 refugios habilitados en varios puntos de la capital.
El reporte detalla que 4.175 familias son del Bañado Norte, 5.249 son del Bañado Sur y 1.581 familias corresponden a la zona de la Chacarita. En tanto que 53 familias viven en casas alquiladas y 1.525 personas fueron albergadas por familiares.
Desde el pasado 10 de mayo al lunes 13 de mayo, se registró un incremento de 1.161 familias damnificadas, en todas las zonas ribereñas, sin variación del número de albergues activos. Esta situación crea un severo problema en los barrios aledaños al microcentro, ya que muchos de los pobladores no quieren que las plazas y otros espacios públicos sean utilizados como refugios.
La Cámara de Senadores sancionó el jueves la declaración de emergencia para la ciudad de Asunción y los departamentos de Central, Misiones, Itapúa, Guairá, San Pedro. El texto pasa al Poder Ejecutivo.
La medida rige por 90 días, con lo que se busca que en este plazo la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) pueda brindar mayor asistencia a los damnificados por las riadas e inundaciones.
