MOSCÚ, Rusia.- El gobierno ruso declaró este viernes en la ONU que las consecuencias del reciente ataque de EE.UU. en Siria son “extremadamente graves” para la estabilidad internacional que pueden tener esas acciones.
Por su parte, la embajadora de EEUU ante la ONU, Nikki Haley, aseguró que su país está preparado para “hacer más” en Siria, pero confió en que no sea necesario, según el medio Infobae.
Estados Unidos lanzó un ataque con decenas de misiles Tomahawk contra la base siria de Shayrat, para castigar al régimen de Bashar al Assad, aliado del gobierno ruso. Esa acción fue justificada por la Casa Blanca como respuesta a las denuncias sobre un ataque con armas químicas registrado el pasado martes en la localidad de Jan Sheijun, del que Washington responsabiliza al régimen sirio.