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WASHINGTÓN.- El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, ya no habln tanto de una “fuerza de deportación” y ahora dice que su muro tendrá “puertas muy bonitas”. La estrategia parece ser clara cuando faltan menos de tres meses para las presidenciales de noviembre, en las que buscará vencer a la demócrata Hillary Clinton.
Con la expectativa puesta en ganarse los votos de las comunidades latina y afroamericana, el millonario intenta bajar el tono de su campaña y mostrarse más conciliador para llegar a las elecciones con posibilidades de convertirse en el sucesor de Barack Obama al frente del Salón Oval.
Hasta el muro con México, su propuesta estrella, tendrá ahora “hermosas puertas”, según los últimos comentarios de Trump, que intentan alejarle de esa imagen de racista, que su rival intenta ahora explotar.
Queda un mes para el primer cara a cara entre Trump y Clinton, el 26 de setiembre, y el polémico candidato republicano está comenzando un viraje en su discurso que le ha valido fuertes críticas.
Trump, que sigue detrás de Clinton en las encuestas, aseguró que las personas indocumentadas que paguen sus impuestos y que no tengan antecedentes penales podrán regularizar su situación. “Tienen que pagar sus impuestos pasados. Tienen que pagar impuestos. No es una amnistía tal cual. No hay amnistía, pero trabajaremos con ellos”, señaló.
