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Un hombre denunció que desde el 1 de mayo último no ve a su esposa ni a su hijo. Se trata de Sergio Amarilla, quien relató en dependencias policiales que en la fecha mencionada se comunicó con su esposa, identificada como Mirna Rosa Mora (25), quien le tenía bajo su cuidado a un hijo de ambos, de 8 años, y posteriormente ya no supo nada de la mujer ni del menor. Según dijo, el niño debería someterse a una intervención quirúrgica en el Hospital Acosta Ñu de San Lorenzo.
SAN LORENZO.- Amarilla, oriundo de Curuguaty, departamento de Canindeyú, denunció que no tiene noticias de su esposa ni de su hijo de ocho años hace más un mes. Según relató, Mirna Rosa Mora y su hijo se trasladaron desde Curuguaty, el pasado 11 de abril, con el fin de aguardar por una intervención quirúrgica programada para el niño, en el Hospital Pediátrico Acosta Ñu. La cirugía fue fijada para el 17 de mayo último, teniendo en cuenta que el menor que padecía de una hernia.
Sin embargo, según el denunciante, perdió todo contacto con su mujer desde el pasado 1 de mayo. “Estábamos chateando hasta las 21:00 del 1 de mayo y después me quedé dormido. Cuando me desperté encontré dos llamadas perdidas de ella, a las 23:00. Intenté llamarle pero el número ya no me daba”, declaró.
Expuso que cuando llegó al hospital, el 16 de mayo, los encargados le dijeron que no había ninguna cirugía programada para su hijo. No obstante, al sondear a los guardias de seguridad y mostrarles la foto de su esposa e hijo, éstos reconocieron a la mujer y aseguraron que la vieron en el centro asistencial al menos en dos ocasiones. Tras lo ocurrido, Amarrilla realizó la denuncia en la comisaría de Posta Ybycuá de en Capiatá, ese mismo día, según dijo.
Precisó igualmente que en una de las comunicaciones previas a la desaparición, Mirna, su esposa, le había comentado que conocieron a una supuesta dama, a quien identificó con el nombre de Zunilda. Siempre atendiendo al relato del denunciante, su mujer le había comentado que se conocieron con la tal “Zunilda” en la Terminal de Ómnibus de Asunción el día que arribaron de Curuguaty y tras una amena conversación, supuestamente resolvieron ir a la casa de ésta para esperar el día fijado para la cirugía.
Al ser consultado por los efectivos del orden sobre si tuvo algún tipo de pelea con su esposa, negó categóricamente el hecho, afirmando que “al contrario, juntos buscamos una solución para el problema de salud que padecía nuestro hijo”, dijo. Ante la falta de noticias de sus seres queridos, Amarilla recurrió a efectivos policiales de la zona de San Lorenzo y medios de prensa, a los efectos de dar con el paradero de su esposa e hijo, para lo cual facilitó varias fotografías de ambos.
