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El presidente del PLRA, Efraín Alegre, no tiene límites en sus disparatados planes que pudieran permitirle ser candidato de la oposición en las elecciones del año próximo. Ahora pretende una alianza con el disidente Mario Abdo Benítez si es que la reelección llega a ser aprobada por el Congreso y un referéndum ciudadano. No dice quién encabezará la chapa.
ASUNCIÓN.- Nunca tuvimos dudas de que la obsesión de Alegre en contra de la reelección es porque sabe que frente a Fernando Lugo u Horacio Cartes no tiene ninguna posibilidad de ser candidato de la oposición, primero, y de ganar las elecciones después.
Y como ahora ve que la enmienda está cada vez más cerca de ser aprobada, su desesperación ha llegado a límites insospechados, a tal punto de que plantea, por primera vez en la historia de la política nacional, una alianza entre liberales y colorados para las elecciones generales, aunque no sería la primera chapa azulgrana puesto que en el 2000, luego de los sucesos trágicos del año anterior, el presidente Luis Ángel González Macchi era un colorado, y el vicepresidente Julio César Franco, un liberal.
Alegre parece dispuesto a repetir esta experiencia que, por cierto, no resultó nada positiva para el país. Ante la cada vez más cierta posibilidad de que Cartes y Lugo vuelvan a competir en las elecciones del 2018, Efraín quiere aliarse con la disidencia colorada, que postula a Abdo Benítez para el mismo cargo que él aspira, la Presidencia de la República.
Según Alegre, “la política ha superado la visión antigua, una visión estrictamente de un color de un partido. Lo importante es la unión en base a principios, a propósitos bien claros, con miras a poder consolidar el proceso democrático”, por lo cual lo que pretende es que se unan “los sectores democráticos que resisten a este atropello a la Constitución, al estado de derecho, a la democracia”.
Lo gracioso de todo esto es que el efrainismo se pasa criticando a sus correligionarios del Equipo Joven por ser “eternos segundones” o “entreguistas” por su supuesto acuerdo con el presidente colorado. Sin embargo, su líder no tiene ningún problema en proponer a la disidencia un acuerdo electoral y no tenemos ninguna duda de que si esto se concreta el que encabezará la chapa será Abdo Benítez, quien, sin embargo no mostró mucho interés en la propuesta del liberal.
Definitivamente, Efraín está dispuesto a pactar hasta con el diablo, si hace falta, con la intención de llegar a ocupar el sillón de los López.
