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LUQUE. En este tiempo en que ya arrecian las críticas al presidente de la Dinac, Edgar Melgarejo Ginard, ya se recuerda también su antecedente. Por ejemplo, en el 2007 estuvo involucrado en un gigantesco negociado con semillas de algodón y matapicudo, proveídos al Estado por su empresa Traintec SA, en el marco de la campaña algodonera.
Según los antecedentes, en el 2006, bajo el gobierno de Nicanor Duarte Frutos, el Crédito Agrícola compró de Melgarejo Ginard más de 72.000 bolsas de semillas de algodón, a un costo cercano a los G. 10.000 millones.
La adquisición se realizó sin licitación ni concurso de precios y a espaldas de la Dirección de Contrataciones Públicas, que fue informada posteriormente de las supuestas “razones de urgencia” del CAH, para incurrir en el ilegal proceso de adquisición.
Posteriormente, se constató que siete días antes de la adjudicación, Melgarejo Ginard viajó junto con funcionarios del CAH a la Argentina para efectivizar la compra. Contrataciones Públicas recomendó invalidar y suspender el proceso de esa compra, pero fue ignorado por el entonces presidente de la institución, Amado Cirilo Ayala.
El Plan Algodonero terminó en un gigantesco fraude y corrupción. Las semillas adquiridas en forma fraudulenta no fueron entregadas en su totalidad a los agricultores, muchos de los cuales recibieron semillas viejas, saldos de la campaña algodonera del 2004 y de años anteriores, como se ha comprobado en las investigaciones. Fueron halladas más de 26.000 bolsas de semillas no distribuidas en poder de empresas y dirigentes campesinos.
