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ASUNCIÓN.- El diputado y titular de la ANR, Pedro Alliana, comentó que el pasado lunes a la anoche llegó del Brasil, después de 92 días de duro y largo tratamiento. “Conseguí alrededor de 10 días de permiso con los médicos del vecino país y luego tengo que volver para mi última quimioterapia. Posteriormente, veremos tras unos nuevos estudios cómo van la médula y la leucemia, que según los profesionales ya es una etapa concluida y estoy sano”, refirió. Ayer se reunió con el expresidente Horacio Cartes, quien por su parte adelantó que “se vienen grandes proyectos”.
Alliana también agradeció a todas las personas que le acompañaron, con sus oraciones y sus fuerzas para vencer esta dura batalla contra la enfermedad.
Recalcó que el tratamiento fue muy duro, incluso tuvo algunas complicaciones, entre ellas un infarto. Mencionó que sin la ayuda de su familia y de algunos amigos, que pusieron todo lo necesario para que viaje al Brasil, no hubiera superado el tratamiento.
Destacó que se siente muy complacido de volver a Paraguay y de poder aportar su granito de arena para seguir trabajando por nuestro país. Comentó que hoy ya estaría participando de la sesión de la Cámara de Diputados, y lo haría en dos ocasiones consecutivas, luego estaría volviendo al Brasil para su última quimio, que corresponde a la etapa de consolidación de la médula.
Indicó que volverá al Brasil en los primeros días de abril, donde permanecería alrededor de 15 días, porque después de la quimio bajan las plaquetas, también la defensa, hay mucho control e incluso aparecen las complicaciones. Terminado todo ese proceso y cuando empiece a funcionar bien la médula, a subir las plaquetas y las defensas, ahí recién va a ser a liberado nuevamente.
Alliana explicó, “me agarró la leucemia más agresiva, pero gracias a Dios nos dimos cuenta en forma temprana de la enfermedad que tenía y pudo ser tratada a tiempo. Es una de las leucemias más agresivas, pero también la más curable, creo que en un 90% ya pasamos esta etapa, porque llegué a tener en un 84% toda las células cancerígenas, logramos superar esa situación y hoy ya no tengo cáncer en la sangre”.
Reconoció que ya ganó una larga batalla, pero no la guerra, aunque está con mucha fe y fortaleza.
