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“Acero” está en problemas

La noticia estalló ayer, repentina, cuando nadie se la esperaba. El Tribunal de Apelación ratificó la concesión del pedido de extradición que pesa sobre el extitular de la Conmebol, Nicolás Leoz, por el caso conocido como el FifaGate. Le quedan ahora pocos recursos al exdirigente futbolero, para evitar sacar el pasaje a los Estados Unidos, donde lo aguarda una Corte, de lo más rigurosa.

Pero no deseamos ocuparnos específicamente de Nicolás  Leoz, quien lamentablemente de la imagen de un gran señor, finalmente, lo arrastró todo por el fango al salir a luz multimillonarias coimas recibidas, lavado de dinero, asociación ilícita, etc., en la época en que era mandamás de la central del fútbol sudamericano.

¡Qué cosas tiene la vida!, para el patrón de ABC, don Aldo “Acero” Zuccolillo. Justo sale la extradición de Leoz, su amigo de toda la vida, desde la infancia, cuando tiene  a su diario embarcado en una feroz campaña para hacerle pagar a HC, las culpas de su amigo, Darío Messer.

Resulta que el tiro sale por la culata y lo que pregona ABC, que HC pague las culpas de Messer, no tiene pies ni cabeza, es un disparate para el ámbito jurídico, por lo que está destinada a la basura, como todas las últimas campañas de ABC. Pero la extradición de don Leoz, amigo del alma de “Acero”,  puede tener ribetes más complicados para el patrón de ABC.

Resulta que según la responsable denuncia de Alejandro Domínguez, actual titular de la Conmebol,  la fenomenal sospecha que se tiene es que las empresas del grupo ABC, lavaron las montañas de dinero escamoteado a la central del fútbol sudamericano, una denuncia gravísima que se hubiera investigado de inmediato, pero que aquí, debido al fuerte influjo de ABC, paso…y paso. Nadie le dio pelota, ni la ahora tan cuestionada SEPRELAV, ni la Fiscalía, ni nadie.  Todo el mundo le señaló con el dedo a “Don Nicolás” y nadie se acordó de “Don Acero”, presuntamente su compinche, ¡quien más que él!, para darle una mano con ese dinerillo al entonces capo del mundo peloteril.

Ahora, el amigo del alma de Zuccolillo, se va a los Estados Unidos. Allá “cantará” todo lo que sabe y los investigadores yanquis, no son como los de acá, que le tienen miedo al poder de ABC, le estirarán el hilo hasta llegar a la punta del ovillo, donde don “Acero” estará, aterrado, por primera vez en su vida, sosteniendo la madeja.

Las cosas se van a complicar. Y quien te dice que no llega también un pedido de extradición para el patrón de ABC. Los yanquis no se andarán con chiquitas.

Y bien merecido se lo tendrá, aunque solamente lo juzguemos por la campaña actual en contra del Presidente. En el caso de HC, amigos son los amigos, afecto y nada más. En el caso de Zucco, con los amigos se hacen negocios…posiblemente turbios.

¿Le llega la hora de pagar todas sus culpas a “Acero” Zuccolillo? No lo sabemos. Elementos hay como pudimos ver.

También creemos en la justicia divina, ¡que parece estar tan patente en este caso!

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