ASUNCIÓN.- El juez Julián López admitió la imputación contra el exfiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, por enriquecimiento ilícito. Por su parte, el juez José Delmás ordenó el congelamiento de las cuentas bancarias y bienes de María Selva Morínigo de Díaz, esposa del extitular del Ministerio Público y también procesada por lavado de dinero.
El juez López ordenó igualmente el embargo de cuentas bancarias y bienes de Díaz Verón, además de dictar prohibición de enajenar y gravar bienes. Fue convocado para el próximo 24 de agosto para su audiencia de imposición de medidas.
Por su parte, el juez Delmás ordenó la medida cautelar sobre las cuentas bancarias a nombre de Morínigo de Díaz, además de la prohibición general de vender y gravar bienes.
Y convoca a la imputada a su audiencia para el próximo 21 de agosto, a las 8:30.
María Selva Morínigo de Díaz está investigada, junto con Díaz Verón, tras constatarse millonarias diferencias entre sus ingresos y gastos, lo que hace suponer que incurrió en lavado de dinero. De acuerdo al acta de imputación, en los años 2013, 2014 y 2016 acumuló una diferencia negativa de G. -991.584.265, dinero que gastó pero sobre el cual no existe documento alguno que respalde un origen lícito.
Las investigaciones sobre el matrimonio se originaron tras el caso de la constitución de la firma Canto Rodado S.A., de la cual son accionistas. En la escritura de protocolización, según la carpeta fiscal, figura que María Selva puso G. 1.500 millones en efectivo y sus hijos Yerutí y Alejandro, G. 500 millones cada uno, según las escrituras públicas, con lo que se llegó a los G. 2.500 millones.