Juan Arrom y Anuncio Martí, procesados por el secuestro y muerto de Cecilia Cubas, quienes se exponen a de entre 15 a 25 años de cárcel.
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Hasta ahora, gobierno no planteó extradición de Arron y Martí

ASUNCIÓN.- Aunque tanto el presidente de la República como su canciller prometieron a la ciudadanía que conseguirían la extradición de Juan Arrom y Anuncio Martí, quienes mantienen el estatus de refugiados en Brasil, lo cierto es que hasta ahora ni siquiera lo plantearon oficialmente. Parece que al gobierno no le preocupa mucho la posibilidad de que el país sea condenado por la Corte Interamericana.

Falta poco más de un mes para que la Corte Interamericana de Derechos Humanos emita una sentencia sobre la denuncia de Arrom y Martí al Estado paraguayo. Esto se realizará el 7 de febrero y, hasta ahora, las versiones dicen que la misma será desfavorable para nuestro país, puesto que se habla de un resarcimiento de 63 millones de dólares.

Aún antes de que se supiera de esta posibilidad, en octubre del año pasado, el presidente Mario Abdo Benítez, a través de las redes sociales, había prometido que el gobierno negociaría con el Brasil sobre la revocatoria del asilo político para ambos prófugos, a fin de extraditarlos y someterlos a la Justicia, que los había condenado por el secuestro de María Edith de Debernardi, en el 2001.

Días atrás, ya con la posibilidad de la condena, el canciller Luis Castiglioni prometió que Paraguay no pagará ni un solo centavo a Arrom y Martí y que su extradición se concretaría en poco tiempo. Sin embargo, dos meses después de la promesa del presidente, hasta ahora nuestro gobierno no hizo ni un solo planteamiento a la Cancillería de Brasil, y, para colmo, Castiglioni, quien debiera estar al frente de las conversaciones, decidió tomarse vacaciones.

En un principio se había dicho que la estrategia del gobierno para evitar la condena de la Corte sería lograr que el Brasil revoque el estatus de refugiados políticos, y se inicie el proceso de la extradición, con lo que demostrarían que ambos no son perseguidos sino delincuentes.

Pero parece que podrían tener alguna estrategia diferente, porque ni se planteó el tema de gobierno a gobierno, ni de canciller a canciller; es decir que, salvo que lean diarios paraguayos, las autoridades del Brasil ni saben que se pretende la extradición de Arrom y Martí y que el Estado paraguayo está a punto de ser desangrado por la Corte Interamericana.

DEFENSA DICE QUE NO SE HABLÓ DE MONTO

Según el abogado defensor de los prófugos Juan Arrom y Anuncio Martí, Rubén Lisboa, si bien la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) había dado unas pautas a seguir al gobierno paraguayo en el caso de sus clientes, hablaba de resarcimiento, pero en ningún momento se mencionó un monto determinado. Acusó por eso al gobierno de inventar lo de los 63 millones de dólares.

Lisboa criticó al gobierno diciendo que “esta no es una demanda por daños y perjuicios así como se da en nuestros tribunales ordinarios, en donde se pide una suma nominada. En el informe del caso, en ninguna parte figura monto alguno. Es una mentira que el Gobierno propagó; se pasaron mintiendo desde el primer momento”.

“Estas personas no leen ni su horóscopo. Lean el informe, hagan un resumen y, a partir de eso, hablen. Tienen 20 asesores que, al parecer, lo único que hacen es decirle lo importante que son”, añadió.

La CIDH había dado unas recomendaciones al gobierno paraguayo y como éste decidió no seguirlas, el organismo recurrió a la Corte Interamericana, que es la que el 7 de febrero tomará una decisión definitiva sobre el caso.

SUGIEREN QUE DEJEMOS ORGANISMO INTERNACIONAL

Según el senador liberal Salyn Buzarquis, luego de que se hable de la posibilidad de que la Corte Interamericana de Derechos Humanos condene al Estado paraguayo a pagar una indemnización millonaria a Juan Arrom y Anuncio Martí, el país tendría que analizar la posibilidad de no seguir en el organismo internacional.

Dijo que “yo creo que Paraguay tiene que pensar seriamente si quiere o no seguir formando parte de la Corte Interamericana de DD.HH., que -así como están las cosas- es una gran falacia. Acá se quiere ideologizar, porque, con todo respeto, si el que secuestra tiene alguna cuestión ideológica, ahí sí los derechos humanos son para los delincuentes”.

 “La democracia también requiere cierto orden. ¿Cuál es el mensaje que le está dando la Corte Interamericana al pueblo paraguayo? ‘Secuestren. Vayan y secuestren, no importa quién sea. Finalmente, la Corte les va a indemnizar, les va a dar un lindo premio de 63 millones de dólares’. Paraguay no puede prestarse a ese chantaje”, añadió.

Buzarquis opinó que “veo que hay sesgos ideológicos; es demasiado claro que quieren beneficiar a Arrom y Martí. Esta gente debe someterse a la justicia. Yo quiero ratificarme: el secuestro acá y en cualquier parte del mundo es un crimen de lesa humanidad. Puede caerte bien o mal la familia que fue secuestrada. Secuestro es secuestro, eso es terrorismo”.

Concluyó diciendo que “si están tan seguros, que vengan y se enfrenten y demuestren que no cometieron un secuestro”.

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