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BOLIVIA.- Centenares de partidarios y simpatizantes del expresidente Evo Morales, quien renunció al cargo el domingo pasado, avanza este lunes hacia La Paz desde la vecina ciudad de El Alto. Entre ellos también se encuentran los miembros de los “ponchos rojos”, histórica formación aymara que respalda a Morales.
La policía boliviana evacuó por prevención a los asambleístas que estaban en la Plaza Murillo, centro polpítico de la capital boliviana.
Esta tarde partió la marcha de enfurecidos seguidores de Evo desde El Alto, bastió del líder izquierdista, en escenas grabadas y difundidas por redes sociales. Por en tanto, en el centro de La Paz, los pocos negocios que estaban abiertos rápidamente cerraron sus puertas por temor a una escalada de violencia.
La consigna de los gritos es clara: “Ahora sí, guerra civil” mientras cargan whipalas, la bandera rechazada por los movimientos cívicos.
La llegada de los manifestantes simpatizantes de Morales hace temer que haya choques con manifestantes opositores que son a la vez protagonistas de las masivas protestas que condujeronn a la renuncia del primer presidente indígena de Bolivia el domingo.
Por su parte, el presidenciable de Comunidad Ciudadana, Carlos Mesa, denunció que un gran número de manifestantes se acerca a su casa y solicitó ayuda a las fuerzas del orden. “Muchas personas me alertan indicando que una turba violenta se dirige a mi domicilio para destruirlo. Solicito a la Policía Nacional que evite esa locura”, escribió en Twitter.
