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Los asaltos armados se registraron en niveles alarmantes en los últimos meses y la mayoría de los casos son perpetrados por motochorros y policías. Este ilícito mereció el refuerzo de los trabajos realizados por las autoridades, quienes se pusieron en campaña y realizaron un minucioso trabajo logrando la captura de varios motoasaltantes que mantenían en zozobra a la ciudadanía, al tiempo de depurar las filas policiales.
CIUDAD DEL ESTE.- En noviembre de este año fueron dados de baja 6 oficiales subalternos y 34 suboficiales, por estar involucrados en diferentes hechos punibles. El caso más reciente tiene que ver con dos efectivos policiales que prestaban servicios en la Jefatura de Policía de Caazapá.
Se trata de los suboficiales Delio Acuña Martínez (28) y Francisco Ayala Insfrán (24), quienes fueron detenidos tras perpetrar un robo de 380 millones de guaraníes. Fue durante un atraco armado del que resultó víctima un ganadero, identificado como Daniel Morínigo González (70).
El hecho ocurrió en el distrito de San Juan de Ñeembucú. Otro caso se registró en Salto del Guairá e involucra al oficial principal Víctor Cáceres Ferreira y al comisario Nelson Rubén Bogarín Flor, sindicados de estar involucrados en un violento asalto ejecutado en perjuicio de un empresario chino, a quien le despojaron de dinero en efectivo, además de joyas y tarjetas de créditos.
En cuanto a los motochorros, en octubre de este año fueron aprehendidos dos de ellos que cometieron al menos 12 atracos en un solo día. Se trata de Leonardo David Espínola y José Ramón Fariña, de 18 y 19 años respectivamente, con frondosos antecedentes penales. La aprehensión de los mismos se produjo durante una persecución policial que movilizó a 15 patrulleras de diferentes comisarías, en Asunción.
BRUTALMENTE ASESINADA
Leidy Ayala, Carlos Bernal y Ricardo Ortellado, encabezan la lista de víctimas de los casos que causaron conmoción a la ciudadanía. La primera citada fue asesinada de 10 puñaladas por un ladrón que intentó robarle la cartera. El hecho ocurrió en agosto pasado, en el barrio San José de Ciudad del Este.
Bernal milagrosamente logró sobrevivir tras permanecer varios días hospitalizado luego de ser atacado a tiros por los delincuentes. El joven sigue peleando dentro de un riguroso tratamiento médico para rehabilitarse. Mientras, a Ortellado le amputaron la pierna a raíz de la bala que se alojó en su rodilla cuando motoasaltantes le dispararon en la vía pública. Estos dos últimos casos se registraron en Asunción.
Maira Celeste Giménez Núñez (24) y José María Riveros (29), también fueron víctimas de asaltos con tiroteos.
Un hecho más reciente ocurrió en la ciudad de Capiatá y resultó víctima Prince Gabriel Collar Bogado, quien fue baleado por los criminales, quienes le arrebataron sus pertenencias. Por este caso fueron detenidos tres personas.
