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Una comitiva fiscal y policial allanó un estudio contable y una escribanía pública que estarían ligados a una organización criminal, liderada por Luis Carlos Da Rocha, alias “Cabeza Branca”. El procedimiento se realizó en Pedro Juan Caballero, después de la detención de Eduardo de Oliveira (43), uno de los miembros de la gavilla. El fiscal Carlos Alcaraz está a cargo de la pesquisa.
PEDRO JUAN CABALLERO.– El estudio contable es propiedad de Darío Resquín, situado sobre la calle Natalicio Talavera y Bernardino Caballero, y la escribanía Wilma Gómez González, ubicada en el centro de la ciudad. Ambas firmas contarían con documentos relacionados al movimiento de divisas de Luis Carlos Da Rocha.
Eduardo de Oliveira fue detenido en horas de la mañana, por agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD). Al momento de su captura, De Oliveira estaba a bordo de una lujosa camioneta, sobre la calle Natalicio Talavera y Bernardino Caballero, del barrio General Díaz, frente a la oficina administrativa, propiedad de Resquín.
Las autoridades apuntan a que el hombre formaría parte de una investigación sobre lavado de dinero y podría ser allegado de Cabeza Branca, capo narco, quien había sido detenido en el 2017, en el Brasil.
Cabeza Branca es jefe de una organización completamente independiente al Primer Comando Capital (PCC) y otros conocidos. Es el líder de su propia organización que operaba el Paraguay y en el Brasil, por ello lo llaman “jefe narco”, y era entonces uno de los delincuentes más buscados a nivel nacional e internacional.
Conforme con los datos, operaba en el país por medio de una fachada agroganadera en la zona Norte, pero es conocida y está comprobada su actividad como narcotraficante. Es uno de los líderes que mayor cantidad de sobornos pagó para operar libremente en Paraguay. El turbio sistema alcanzó hasta a agentes especiales, revelaron en su oportunidad los investigadores.
