Las constantes lluvias e inundaciones que afecta a casi todo el territorio nacional desde hace varias semanas, ya provocó daños en unas 300 mil hectáreas de cultivo de granos, como la soja y el trigo. La producción que ya fue cosechada está germinando en las plantas de almacenaje, donde terminan pudriéndose. De continuar esta situación, los productores estiman que deberán importar semillas para la próxima siembra.
ASUNCIÓN.- Héctor Cristaldo, presidente de la Unión de Gremios de la Producción, explicó que la situación es “bastante preocupante en varios departamentos, aunque no tan crítico como en el sur”. Agregó que hace “unos 20 días que no sale el sol y estamos en plena época de cosecha”.
La producción más afectada es la soja, seguido del trigo. “La situación es preocupante, son casi unas 300 mil hectáreas que están siendo afectadas, hay un panorama poco favorable porque no hay buen tiempo, esperemos que podamos hacer trabajos conjuntos para solucionar este tema, muchos productores ya nos manifestaron su preocupación por esta situación”, expresó Cristaldo.
Mencionó igualmente que aquellas producciones que lograron ser cosechadas y almacenadas, se están descomponiendo en las plantas de almacenaje. “Las lluvias hacen que el grano germine en la planta y se pudra el cultivo”, indicó.
“La gente está preocupada, pierden cuatro meses de trabajo y por otro lado, pueden faltar semillas para la próxima siembra. Probablemente se tenga que importar semillas, lo que genera un panorama no muy alentador para el sector”, detalló.
Por su parte, Darío Bernal, miembro de la Asociación de Productores de Semillas del Paraguay (Aprosemp), manifestó que las abundantes lluvias destruyeron al punto de pudrición las plantaciones de soja zafriña que se destinan a la provisión de semillas para la próxima zafra sojera 2017/2018. Anunció que por falta de cosecha óptima, las semillerías están totalmente paradas a diferencia de años anteriores.
“Esta es la época en la que se tiene que procesar la semilla recibir, limpiar, procesar, embolsar y almacenar. En esta época, la empresa está normalmente recibiendo y analizando, pero ahora no estamos trabajando”, lamentó.
Bernal comentó que la mayoría de los operarios en las industrias semilleras son zafreros y que los que están en la parte de contratos siguen cobrando mientras la empresa está parada. “En algunos casos están esperando, porque no está fácil la parte económica para todas las industrias semilleras”, expresó.
La última vez que aconteció una falta de aprovisionamiento local de semillas fue en el 2012 por causa de una sequía. Bernal mencionó que habrá que ver la manera de importar semillas de Brasil y Argentina, porque la semilla que se va a producir no va a cubrir el área nacional de 3.300.000 hectáreas.