CIUDAD DEL ESTE.- El Colegio y Escuela Primer Intendente de la capital del Alto Paraná sufre por las obras inconclusas encaradas por la Gobernación del Alto Paraná. Varios grados siguen sin iniciar las clases debido a que los trabajos de albañilería siguen realizándose. La casa de estudios alberga a más de 1.200 estudiantes.
Los docentes también denunciaron que varias salas desmanteladas no cuentan con ventiladores y muebles, teniendo en cuenta que están casi destruidos los equipos que fueron sacados de las salas. Ante esta situación, pidieron donaciones, a fin de equipar nuevamente las clases de los niños.
Rafaela Barreto, una de las docentes de la institución, dijo que de manera urgente necesitan ventiladores y diferentes tipos de muebles, porque al comenzar las clases, pese a tener nuevas salas, no estarán en condiciones para recibir a los niños.