ASUNCIÓN. El senador liberal Salyn Buzarquis parece tener una confusión mental grave, ya que olvida que su papel es estar en el Congreso, trabajando por la sanción de las leyes, y no encadenándose ante instituciones públicas para conseguir el mismo objetivo. Esto debería dejar a los ciudadanos comunes, quienes no tienen otra alternativa para presionar a los poderes del Estado a fin de que actúen en beneficio del pueblo.
Tal como hizo cuando el Senado trató el proyecto que anula las facturas de ANDE y Essap durante la cuarentena, hoy volvió a encadenarse ante las rejas de la primera institución, porque el pleno deberá analizar esta mañana el veto del Ejecutivo a dicha ley.
Por lo visto, en aquella ocasión pensó que fue su “encadenamiento” el que hizo que sus colegas aprobaran el proyecto, y no los contundentes argumentos esgrimidos a favor, ante las graves irregularidades cometidas por las empresas que prestan los servicios públicos, que emitieron facturas abultadas en un momento en el que la recesión económica golpea duramente a la ciudadanía.
El día en que nuestros legisladores entiendan que no es el show que realicen para satisfacción de los medios de comunicación, sino un trabajo serio y constante, lo que dotará a la población de un marco legal adecuado para proteger sus intereses, posiblemente la situación del país mejore considerablemente. Mientras tanto, Buzarquis y otros como él lo único que hacen es montar un circo mediático para lucimiento personal. Un bluf lamentable y ya aburrido a esta altura.