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ASUNCIÓN. El titular del Ministerio de Relaciones Exteriores (MRE), Euclides Acevedo, expresó que la reapertura de frontera terrestre con Argentina es “es una suerte de cotidiana dulce espera”, aunque admitió que hay otro “problema”, pero insistió en que ya es una buena noticia el anuncio argentino de reapertura gradual de sus fronteras.
Sus palabras se dieron durante una breve conversación con comunicadores de la radio 1000 AM, ocasión en la que el Canciller Nacional insistió en que, atendiendo a los últimos reportes epidemiológicos de las autoridades sanitarias del vecino país, prácticamente no habría razón, al menos en este momento, para reabrir los pasos fronterizos.
“De acuerdo a lo que dicen los gobernadores provinciales (argentinos) aguardan la reglamentación del decreto (del presidente Alberto Fernández) y, en segundo término, con el caso de Formosa, siguen los monitoreos epidemiológico del Ministerio de Salud con el Ministerio de Desarrollo y dan informes sumamente saludables, por decirlo de alguna forma”, amplió.
Sin embargo, dejó escuchar que “en este momento, por decirlo, el problema es político”. “Esperamos la reglamentación del decreto (del presidente Alberto Fernández) y en todo caso una solicitud de parte de los gobernadores (argentinos) para la reapertura. Sigo confiando en la buena fe de los gobernadores y en la celeridad de sus cuestiones administrativas”, remarcó.
En la víspera, Acevedo recordaba que en ciudades como Encarnación y Posadas, Alberti y Formosa, Nanawa y Clorinda, Pilar y Puerto Cano lo que está en juego es la reanimación comercial de estos puntos fronterizos.
“Es un compromiso que hay que asumirlo y cumplirlo. Sigo siendo optimista, no obstante esta especie de pasada de pelota entre el Gobierno central (argentino) y los gobiernos provinciales. Pero, esas son las contradicciones de Estados que tienen esta particularidad”, subraya el Canciller.
Finalizó, reiterando que las razones epidemiológicas han dejado de tener trascendencia habida cuenta de los respectivos controles de la pandemia de ambos lados, paraguayo y argentino.
