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ASUNCIÓN. Según el abogado Diego Lansac, representante de la familia de Analía Rodas, cuyo cuerpo fue encontrado sin vida el lunes pasado, después de estar 8 meses desaparecida, los fiscales trabajan con mucha precariedad y lo que él les cuestiona es que no hayan sacado un oficio emplazando a las telefonías a entregar el informe solicitado sobre su celular.
El trabajo del Ministerio Público fue muy criticado ya que el hallazgo del cuerpo se produjo cuando tomó intervención la Unidad Antisecuestros de la Policía Nacional, pero Lansac insistió en Tempranísimo, por la 970 y GEN que “hay que entender que hay muchísima precariedad. Para mí la falta más grande del Ministerio Público fue no haber sacado un oficio emplazado a las telefonías en 24, 48, 72 horas el informe. Yo me puse en contacto con la fiscal general y metió unidades especializadas”.
Comentó que el sábado la familia conoce la decisión de la intervención de la Policía, que el lunes encuentra el cuerpo; y añadió “no sé qué es más grave; el hallazgo del cuerpo de Analía o el sospechoso”, refiriéndose al hermano de la víctima, Fernando Rodas, quien confesó haberla matado.
Refiriéndose nuevamente a las precariedades, dijo que “se sospecha que la escena del crimen es la cocina pero no tienen luminol para ver si hay sangre. Dentro de las precariedades, la Fiscalía hizo lo que pudo. Pero los 7 meses de angustia se pudieron haber solucionado con un oficio de carácter urgente a las telefonías”.
“La casa de Analía tenía una particularidad, que compartía 3 celdas, no era la misma celda cuando hablaba adelante o adentro de la casa o atrás. La última vez ya se conecta a una sola celda. Ya no se movía y dejó de traficar datos. Nosotros le facilitamos a la fiscalía las conversaciones y los audios del hermano cuando Liliana, la hermana, le consultaba si ya había vuelto. En las conversaciones ya él se refería a Analía en términos peyorativos”, explicó el abogado.
Al referirse al autor confeso del crimen, Lansac dijo que “él permanentemente cambia la versión. Primero fue en el baño, se cayó y se desnucó. Luego fue en la cocina. Lo que siempre sostuvo en que el celular estaba allí pero no recordaba exactamente el lugar”.
“Hay periodistas que dicen ya estaba muerta y da igual. Pero pasa por la incertidumbre, esto le permite a la familia cerrar el capítulo. La familia me dice que si bien no les gusta el trabajo de la Fiscalía, no les gusta lo que ocurre ahora de querer politizar ese trabajo, porque contaminan la investigación”, concluyó.
