ASUNCIÓN.- Mónica Castañé, madre de Belén Whittingslow, acusó a los ministros de la Corte Suprema de Justicia por lavarse las manos en el caso de su hija, que sigue refugiada en Uruguay, por deber favores a los responsables de la Universidad Católica de Asunción.
Ni siquiera el nuevo ministro, Gustavo Santander, se animó a enfrentarse a la UCA y decidió inhibirse del caso. “Mi hija tiene la vida parada y con problemas de salud”, dijo en la 1020 la mamá de Belén.
Whittingslow había denunciado a un profesor de la Católica, Cristhian Kriskovich, por acoso sexual y en represalia, el centro de estudios la acusó de haber comprado temas de exámenes, por lo que salió una orden de captura en su contra y tuvo que refugiarse en Uruguay, mientras el presunto acosador sigue, hasta ahora, gozando de todos sus privilegios.
Castañé aseguró que “nunca se tuvo que realizar la captura. Se está realizando un caos jurídico. Los propios ministros son los primeros que sancionan a los jueces y abogados que demoran los juicios, y en este caso son los mismos ministros que llevan retrasando esta respuesta de acción constitucional hace años”.
“Me parece que detrás de todo esto está la UCA y los favores que le deben ciertos ministros de la corte a todo este sistema corrupto”, concluyó.