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Se acerca el clásico, se calienta el ambiente con las novedades en los dos equipos, independientemente que la temperatura ambiente descienda varios grados. Es que este tradicional enfrentamiento, se renueva cada año y esta vez les toca enfrentarse en privilegiada ubicación. Ambos llegan tras ganar sus respectivos compromisos de la quinta fecha, Olimpia al Deportivo Capiatá y Cerro Porteño al 3 de Febrero.
ASUNCIÓN.- Cerro Porteño, líder e invicto, pero apenas a un puntito de su principal perseguidor, Olimpia, último campeón oficial del fútbol paraguayo, velan armas a 4 días trascendental partido con mensajes bien claros: ambos quieren ganar. Ninguno de los dos quiere resignar la privilegiada posición que ocupan. Ergo: esperamos un gran partido.
WILLY SIGUE EN DUDA
Hasta el entrenamiento de ayer, cuando Olimpia regresó al campo, las noticias sobre el estado físico de William Mendieta no eran alentadoras. Seguía en proceso de recuperación. Se estima que podría estar para el encuentro del domingo, pero ya lo dijo el DT, Daniel Garnero: “Si no está ciento por ciento, no va a jugar”. De hecho el estratega olimpista trabaja con los mismos que golearon a Deportivo Capiatá.
Una posible modificación es el regreso de Iván Torres como volante por izquierda, con lo que Fernando Cardozo volvería a la derecha y se mantendrían los dos centrales: Richard Sánchez y Richard Ortiz. En los demás puestos no se avizoran modificaciones.
UN CONEJO DE LA GALERA
Luis Zubeldía quedó muy satisfecho del rendimiento de su equipo en Ciudad del Este. Por la dinámica que mostró, por las numerosas situaciones de gol que supieron crear sus jugadores y también porque la incógnita que representaba poner en la cancha casi a ciegas a Jorge Benítez. Fue como “sacar un conejo de la galera”, sin saber que sucedería. Y “Conejo” Benítez respondió, por lo que es seguro que sea alistado.
Tambien satisfizo la labor de Arzamendia, al que ya se lo extrañaba. Y ni qué decir el golazo que anotó Nelson Haedo Valdez, que en los pocos minutos que jugó, demostró estar en condiciones de dar una buena mano al equipo, las veces que sea necesario.
