Comer demasiada carne roja, como las salchichas o el tocino, es indicio de causar problemas de salud, según las evidencias.
Un nuevo estudio afirma que los cambios en los hábitos de comer carne roja pueden relacionarse con el riesgo de muerte prematura. El aumento de consumo de carne roja de más de una mitad de porción al día se relacionó con un 10% de riesgo de muerte prematura en el estudio publicado en la revista médica BMJ. Se encontró además, que el reemplazo de la carne por otras fuentes de proteínas podría ayudar a vivir más tiempo.
“Los datos sugieren que reemplazar la carne roja con otras fuentes de proteínas, como aves de corral, pescado, nueces, legumbres y granos enteros e incluso vegetales, puede reducir el riesgo de muerte prematura”, manifestó el autor del estudio, doctor Frank Hu, profesor de nutrición y epidemiología y presidente del Departamento de Nutrición de la Escuela de Salud Pública THard de Harvard,
“Lo que encontramos es que aumentar el consumo de carne roja se asocia con un mayor riesgo de mortalidad, y el riesgo es particularmente alto para las personas que aumentaron su consumo de carne roja procesada”, afirmó.